Transporte. No circularán trenes, colectivos, subtes, ni aviones en todo el país, ya que adhieren a la medida de fuerza los veinte sindicatos del transporte de la CATT, incluidos los portuarios, marítimos, aeronáuticos, colectiveros y ferroviarios. También paran los metrodelegados (CTA), por lo que no funcionarán los subtes.
Sin clases. Paran los sindicatos que agrupan a maestros de escuelas públicas y privadas, así como los que representan a los profesores universitarios.
Bancos. Las sucursales bancarias de todo el país permanecerán cerradas. La protesta afectará además la habitual tarea de recarga de los cajeros.
Sin SUBE. La Unión de Kiosqueros (UKRA) informó que martes y miércoles no cargará las tarjetas de transporte público SUBE, Red Bus (Córdoba) y MOVI (Rosario).
Residuos. Tampoco habrá recolección de residuos ya que el gremio de los camioneros se pliega a la medida de fuerza.
Hospitales. Los médicos y profesionales de la salud mantendrán sólo guardias mínimas.
Estado. Los trabajadores estatales de UPCN y ATE no prestarán servicios, por lo que las dependencias de la administración pública permanecerán cerradas.
La medida contra el gobierno de Mauricio Macri incluirá también el acompañamiento del triunvirato de organizaciones sociales que conforman la CTEP, Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa (CCC).
Las agrupaciones sociales realizarán el martes, un día antes del paro, una “jornada nacional de ollas populares” en distintos puntos de la Ciudad de Buenos Aires y de otras del interior, para manifestar su malestar por el modelo de país que promueve Cambiemos.
El Gobierno, lejos de buscar un programa de emergencia para los que menos tienen, pretende dar certidumbre y previsión a los mercados, dar señales de solvencia a los acreedores y continuar con el ajuste de la economía, con el único objetivo de llegar a las elecciones sin sobresaltos”, se quejó la CGT en el documento en el que detalló los motivos de la huelga.
