Luego que el juez de Instrucción de Federal, Pedro Raúl Navarro ordenara la búsqueda de la secretaria de ese juzgado, Laura Emilse Almada Ferri, la policía no pudo aún dar con su paradero. Se la busca desde el jueves pasado. Por lo pronto, no se piensa en nada trágico (aunque todos coinciden en asegurar que tenía algunos problemas vinculados a depresión), las hipótesis van desde que vacaciona en Chile o que está escondida en algún lugar del país y con la complicidad de la familia y/o de amigos. Se conoce sí, que le envió un mensaje a su hermana en la que le pide que se quede tranquila porque ella está bien aunque le aclara que no volvería más a Federal.
LA JUSTICIA…
Según nuestra alta fuente judicial consultada, Almada no tendría razones para escaparse,
por lo menos, dice, “parece poco probable una huida para eludir responsabilidades, porque las acusaciones contra ellas no eran muy graves, y lo más que podían costarle era un apercibimiento o llamado de atención”.
Laura Emilce Almada es una abogada de Paraná, a quien se la nombró interina como Secretaria del Juzgado de Instrucción de Federal. Tuvo una serie de problemas en el desempeño de su cargo, que derivaron en algunas denuncias contra ella por mal desempeño. Según la fuente, ninguna de las acusaciones eran realmente graves, sólo algunas desprolijidades y pequeñas irregularidades en los expedientes que manejaba.
El Superior Tribunal de Justicia decidió hacer un sumario para averiguar bien las cosas, y se encomendó la tarea al Fiscal general adjunto Jorge Beades.
Beades se trasladó a Federal, citó a la funcionaria, quien se encontraba en uso de licencia por tratamiento médico. Según certificados que presentó se encontraba en tratamiento psiquiátrico por distintos inconvenientes (depresión, problemas nerviosos, etc).
He ahí que, al citarla, no apareció y nadie supo dar razón de su paradero. Avisado el Juez Navarro, dispuso que la buscara la Policía. Se allanó su domicilio y se encontró entre otras cosas, todo en orden, la computadora tapada con una funda, los artefactos eléctricos, incluida heladera, desenfuchados, etc. Es decir, indicios todos reveladores de una persona que se va a ausentar de su casa por un tiempo, y no de que haya desaparecido de golpe o que la hayan sacado con violencia. Por lo demás, cuando se llama a su celular atiende su Sra. madre, a quien ella se lo habría dejado. Dice ignorar donde está su hija, pero no se muestra angustiada ni demasiado preocupada. Por eso prácticamente, se descarta alguna hipótesis drástica, como por ejemplo un secuestro o un suicidio. Tampoco parece probable una huida para eludir responsabilidades, porque las acusaciones contra ellas no eran muy graves, y lo más que podían costarle era un apercibimiento o llamado de atención.
Las versiones circulantes son que esta Srta. se habría ausentado con una nueva pareja y se encontrarían en una especie de «luna de miel» presumiblemente en Chile, donde ella estuvo de vacaciones hace poco tiempo.
EN LA POLICÍA
Aquí en cambio, se sospecha que Almada estaría escondida en algún lugar del país y que, para ello, contaría con la complicidad de amigos y familiares. La alta fuente policial consultada cree que la ausencia de Almada está relacionada a los problemas en el juzgado de Instrucción y que podría existir de parte de ella un mensaje cifrado para que la justicia amplíe la investigación en ese juzgado. Se esperan informes tanto de otras policías del país como de migraciones en zonas fronterizas. La policía sospecha incluso que, si se fue del país, no es para descartar la posibilidad de que el destino haya sido Cuba, debido a una fuerte relación sentimental.
