Ñenzú sigue en estado delicado y los médicos dicen que todavía hay que esperar para saber si podrá recuperarse y cómo. Tiene traumatismo de cráneo grave y en estos días se le extirparon algunos coágulos de su masa encefálica, pero sin que esto evidencie mejoras sustanciales. El chico viajaba junto a otros cosechadores arriba de la pila de cajones con frutas que eran transportados e un camión marca Chevrolet 814, patente UNP-281, conducido Mauro Scatolaro, de 34 años y vecino de Chajari. A la altura de la escuela “Falucho” pierde una rueda y cae sobre uno de sus costados. En el accidente fallece instantáneamente un adolescente de 15 años, Pablo Acuña, del Barrio Retobo.
El grupo de obreros trabajaban para dos productores locales, identificados como Luis Calgaro y Walter Panozzo y, de acuerdo a lo averiguado por DIARIO JUNIO, fue éste último –Panozzo- quien se acercó a los familiares del fallecido Acuña y puso dinero para el pago del sepelio. Asimismo, según lo averiguado por este diario, también asistió económicamente a la familia de Ñenzú, que esta en Concordia acompañando al chico. Y también se hizo presente en el nosocomio mencionado. Sin embargo, desde el Sindicato de la Fruta, revelaron que los dos empresarios “se lavan las manos y se quieren desentender del problema y se pasan la pelota uno a otro”, ya que también es cierto que por el accidente en si, a ellos no les cabe responsabilidad legal alguna.
Además, este medio pudo saber que los peritajes realizados por Criminalística de la Policía de Chajari en el lugar de los hechos el día del accidente, arrojaron datos llamativos, como una frenada donde se percibe una marca zigzagueante de una rueda unos cuantos metros antes del lugar del hecho, y algunos pedazos de piezas metálicas, posiblemente pertenecientes a los bulones de la rueda que se desprendió.
Los ocho trabajadores trabajaban en negro. Se trata de Walter Fernández de 18 años de edad, Franco David Rulera, de 19 años de edad, Nahuel Antonio Ñenzu, de 20 años de edad, Gerardo Marcos Melgar de 19 años de edad, Maximiliano Basualdo de 17 años de edad e Ivan Antonio Baltieri, de 30 años de edad, que resultaron con traumatismos varios, lesiones de carácter leves. Todos alcanzaron a largarse del rodado mientras este iba cayendo hacia uno de sus costados.
El hecho, lejos de generar conciencia o alertar a los órganos de control sobre uno de los problemas que mas se han remarcado (la gente que viaja en los camiones arriba de la carga) todavía se sigue observando a diario en Chajari y la zona.