Entre otras iniciativas, Cresto determinó que todas las secretarías municipales deberán reducir, en un plazo de 30 días, la cantidad de cargos que componen su estructura orgánica, “dentro de un marco que asegure la eficiencia, transparencia y el orden en la prestación de servicios”.
Álvaro Sierra, flamante secretario de Gobierno de la Municipalidad, puntualizó que la medida implica una reducción del 15% en la estructura de cargos de cada secretaría.
Sobre la modificación y su impacto político, Sierra aseguró que la reducción busca también mayor concentración de poder en la figura de Enrique Cresto.
“Las decisiones políticas las toma el intendente, el resto las ejecutamos” dijo.
En la nueva resolución, entre otras medidas se prohíben nuevos contratos y se regula un estricto control sobre pedidos de adelantos y reintegros además de establecerse un régimen de gastos para movilidad y viáticos de funcionarios.
“No son medidas de ajuste sino de orden a la ejecución de gastos públicos, y que ese orden se redireccione” avisó Sierra.
El funcionario también anticipó que en los próximos días se enviará el proyecto de modificación de la orgánica municipal y que se contemplará allí la elevación del área de Producción a Secretaría.