En diálogo con APF, Servín explicó que la “pobreza violenta” que se vive en nuestra ciudad se debe a que “la gente está viendo lo que otros consumen y le ofrecen no sólo en las vidrieras, sino en las pantallas todos los días, y cada vez están más marginados”.
“La exclusión de la que hablamos no es la de antes, que no tenía barreras para poder superarse. Hoy es una marginación sin esperanza. Esto despierta una agresividad enorme frente a otro mundo que está pegado al de uno”, acotó.
En línea con este razonamiento agregó que “existe una publicidad agresiva que impone, y por otro lado se asustan cuando alguien llega a cometer un delito y hasta a veces matar por un par de zapatillas. Nos enloquecieron a todos”.
En este punto, reflexionó: “no podemos tapar el sol con la palma de la mano” y vinculó la situación actual con las políticas implementadas “de (Alfredo) Martínez de Hoz en adelante”, entrando en una “caída libre”. “Hemos perdido industrias y, durante el proceso militar, 7 mil puestos de trabajo con una población que sería la mitad de la actual”, recordó. “Nos olvidamos que en el año 1985 duplicábamos la desocupación nacional, que en abril de ese año era del 6,5% y nosotros estábamos por encima del 13 por ciento”, agregó.
Dirigiendo su análisis hacia la actualidad, Servín subrayó que la lucha contra la pobreza y la indigencia “se va dando a través de los planes sociales (y) los comedores que hasta de noche atienden”, lo que calificó como una “salida de emergencia”, frente a lo cual opinó: “Me parece que alguna vez tenemos que proponernos muy firmemente que la respuesta a este problema es el trabajo. Y Concordia tiene posibilidades de generar trabajo”.
El sacerdote resaltó que si bien se ha desandado algo este camino “no hemos generado lo que podríamos” y apuntó como que la Capital del Citrus no ha tenido el desarrollo acorde a sus potencialidades.
En orden a eso, lamentó el hecho de que “tenemos concesionadas a una empresa las termas, algo que no se ha dado en Federación, en Chajarí o en Villa Elisa, donde son del Municipio”.
También remarcó las posibilidades en horticultura, ya que según estimó, “estamos trayendo a Concordia el 80 ó 90% de la verdura de hoja y las hortilizas de afuera. Hay una cooperativa que está haciendo un planta para empacar 40 mil kilos de verdura en 9 horas, y está produciendo cuatro mil”.
En este sentido, se quejó de que los proyectos de generación de trabajo “siempre están en palabras, en las plataformas y nunca se ha llegado a una política donde se establezcan los caminos legales para favorecer de veras a quien quiere producir”.
“Si no hay trabajo no hay independencia ni proyecto de vida ni sueños para la gente joven”, concluyó.