Rotman explicó que para los sanatorios la electricidad es “una cuestión de vida o muerte”. “Los sanatorios y las clínicas somos electrodependientes. No podemos subsistir sin la energía eléctrica”, añadió. “La energía eléctrica alimenta todo: es el pulmón más importante”, dijo. La energía debe estar disponible para los quirófanos y la terapia intensiva debe estar disponible las 24 horas los 365 días del año. Además, la electricidad alimenta los aparatos de imagen como los tomógrafos, los equipos de hemodinamia, los equipos de rayos x o los ecógrafos. “Somos grandes consumidores: pagamos mensualmente entre $ 300.000 y $ 400.000. Pero hemos tenido meses donde hizo más frío con boletas de $ 700.000”, indicó.
En tanto, Montangie dijo que el Concordia abona aproximadamente $ 600.000 mensuales por la energía eléctrica. “Es muy difícil trasladar ese costo a los ingresos. Realmente no sé cómo vamos a poder solventarlo y el riesgo de no poder subsistir es cada vez más importante. No sé en qué puede terminar: para bien nada, para mal todo”, dijo.
Más adelante, Rotman sostuvo que, de aplicarse la segmentación, el importe que abonan se incrementará en un 100 % o más. En consecuencia, al Garat llegarán facturas de $ 1.200.000 o $ 1.500.000 en marzo del año que viene. “Y eso hay que pagarlo”, indicó. “Para nosotros se nos hace cuesta arriba en momentos en que las instituciones médicas privadas se mantienen como pueden. Cuando llegamos a fin de mes y pagamos el sueldo a todo el mundo: aplaudimos”, recalcó. Según explicó, el funcionamiento de un sanatorio está reglado: debe haber una cantidad estipulada de enfermeras y mucamas por cama. De hecho, cerca de 500 familias dependen del Garat.
Por el lado de los ingresos, el médico indicó que los pacientes son, en su inmensa mayoría, afiliados a obras sociales o prepagas. Los pacientes particulares (sin obra social) son “muy raros”, generalmente son de condición humilde y acuden a los hospitales. Por ello, las obras sociales pagan a los tres, cuatro o cinco meses a valores históricos y después “hay que andar peleando para que no te descuenten”. Y el valor de las prestaciones “no las pone el sanatorio, las pone la obra social que dicen ‘le vamos a pagar tanto’. El sistema de salud de la Argentina necesita una puesta al día y una verdadera reforma”, dijo.
Asimismo, el ex ministro de Salud sostuvo que el costo de la salud, muchos de los insumos se pagan en dólares, se ha encarecido pero para un mejor resultado. Y argumentó que ningún paciente de tal o cual obra social quiere ser atendido con una calidad menor o inferior a la que recibiría otro paciente con una prepaga. El sanatorio debe darle calidad en la atención a todos y los costos de los adelantos tecnológicos hasta ahora no se han actualizado por parte de las obras sociales.
Para el ex diputado, se necesita mirar que pasa en los países desarrollados. “Yo creo que acá se necesita un seguro nacional de Salud donde el aporte se haga a una o dos cajas. No como ahora que hay más de 100 sindicatos a los que hay que hacerles los aportes”, indicó. Rotman recordó que Aldo Neri, ministro de Salud del presidente Raúl Alfonsín, presentó un proyecto de seguro de salud que era “excelente”. “Al mejor estilo de los países desarrollados”, añadió. Pero fue bloqueado por el sindicalismo. “Sacarles el manejo del dinero a los sindicatos en este país, es muy difícil”, remarcó.
Por otra parte, Rotman explicó que a través de ACLER (Asociación de Clínicas y Sanatorios de Entre Ríos) pidieron una reunión con la Cooperativa Eléctrica de Concordia. Fueron atendidos por el presidente del Consejo de Administración, Marcelo Spinelli, y le vicepresidente Martín Santana. En esa reunión, les explicaron la situación y les ofrecieron cualquier tipo de asesoramiento que requieran.
Desde el sector sanatorial se fueron satisfechos por la disposición para el encuentro, aunque no hubo mucho más para ofrecer. “Se fueron muy conformes, nos dijeron varias veces que fuimos los únicos que los recibimos, les quedó muy clara la explicación y saben que no podemos hacer mucho, pero tomaron a bien que los podemos acompañar en cualquier reunión que tengan por los conocimientos técnicos para hablar con propiedad, dijo Santana.
En el encuentro, desde la CEC indicaron que una opción para abaratar costos sería la energía solar. Rotman la descartó por el momento. El costo de la instalación es altísimo. Ya hicieron averiguaciones y la colocación de los paneles solares, como los que necesitan en el sanatorio, cuesta más de US $ 100.000. El tema es la obtención del dinero. Rotman señaló que los bancos no dan préstamos a las instituciones médicas. “Estamos en una coyuntura muy difícil”, dijo.
“Hemos pedido una reunión con el gobernador Bordet o quien designe él. Puede ser la ministra de Salud, Sonia Velázquez, o la ministra de Gobierno, Rosario Romero”, dijo. Rotman sostuvo que las boletas de luz de todos los sanatorios tienen un descuento establecido durante la pandemia por la sobrecarga de trabajo y de costos durante ese tiempo. “Eso está vigente hasta fin de año”, indicó. El primer pedido será que se mantenga ese beneficio en el tiempo.
Una fuente de la CEC explicó que el beneficio no fue otorgado a todas las instituciones de salud ya que las que atienden a pacientes con problemas de Salud Mental fueron excluidas a pesar de que, cuando alguno de los internos se enfermaba de Covid 19, no eran trasladados a otro lado, sino que los atendían allí. En total solo cinco instituciones de la ciudad reciben el beneficio de un total de 20 aproximadamente.
Esas instituciones pagan el 50 % de lo que consumen. “El sanatorio Garat paga $ 300.00 cuando debería pagar $ 600.000. Ese beneficio se termina el 31 de diciembre. Cuando se aplique la quita total, en marzo de 2023, el sanatorio va a tener un aumento de entre el 90 y 100 %. En vez de los $ 600.000 va a pasar a pagar $ 1.200.000 más los impuestos”, indicó Santana.
¿Cuánto se paga de impuestos en las tarifas de energía eléctrica? El IVA (Impuesto al valor Agregado) es del 21 % más un 13 % de impuestos provinciales más un 24 % de la municipalidad: 58 % en total. Pero representan un 38 % del total de la factura. Santana dijo que podría pedirse que la Nación cobre el 10,5 % en vez del 21 % de IVA más o pedir al municipio que cobre un poco menos por el alumbrado público.
Informe: Guillermo Coduri