La profesional explicó que el servicio es solo para pacientes con casos agudos, y no era éste el caso del imputado.
Gutierrez, denunció que había sido amenazada por familiares de Gómez para que cambiara su informe de modo que el policía que es investigado por haber tomado la jefatura de policía en diciembre del año pasado pudiera quedar en el hospital en vez de regresar a la cárcel de federal.
El Juez de garantías, incluyó el testimonio de la mujer en la audiencia de esta mañana, que se realizó alrededor de las 8.30 tras la que Funes resolvió que tanto Gómez como Chávez (otro policía con presuntos problemas psiquiátricos), fueran trasladados a la Unidad Penal de Paraná, que cuenta con equipo psiquiátrico y pabellón de policías. E interesó que las pericias ordenadas fueran realizadas por los médicos de esa institución.
Lo ocurrido, no hace más que fortalecer el argumento de la fiscalía, que ya había sostenido en la audiencia de apelación a la prisión preventiva, que una prisión domiciliaria sería inútil para evitar que los imputados entorpecieran la investigación, porque estaba comprobado que estos utilizaban a sus propias esposas para amenazar a testigos.
