Este martes la cámara de Casación dio a conocer su resolución luego de revisar las condenas en juicio de primera instancia de 16 policías por el delito de Sedición, tal como lo ordenara el Superior Tribunal.
En la audiencia celebrada el pasado 8 de marzo en el Centro de Convenciones (CC), las defensas de los policías pidieron, ante la Cámara de Casación de Concordia, la prescripción de la causa y fueron por más solicitando la anulación de las sentencias de 2015 que dictaron los vocales Perroud, Barbagelata y Gallo. La fiscalía, por su parte, pidió la ratificación de las sentencias.
El nuevo tribunal integrado por Evangelina Bruzzo, Mariano Caprarulo y Fernando Martínez Uncal resolvió no dar lugar a los planteos de los abogados de los policías y ratificó las condenas.
La condena en el juicio de primera instancia contra los policías sediciosos conlleva penas que van de los tres a los cuatro años y medio.
El Dr. Martín Nuñez explicó en su momento a DIARIOJUNIO que si bien las condenas no eran las deseadas por la fiscalía, la causa se fue dilatando de tal manera que, a su criterio, “muchas veces es preferible una solución con una pena más baja, pero que quede firme y no esta situación de años y años de recursos tras recursos”. Y agregó: “Cuando más se va dilatando una causa más se va arrimando la prescripción de la misma. Además, otra cosa que pasa es que, cuando se va a aplicar la pena, el sujeto ha rehecho su vida, ha cambiado su realidad, la gente, las víctimas ya no tienen tan presente el caso como cuando ocurrió y también esa sensación de que la Justicia llega tarde”.
Sin embargo, todavía no está dicha la última palabra y las sentencias de aquel lejano juicio de 2015, confirmadas hoy por Casación, son probables de ser recurridas por las defensas ante el Superior Tribunal.
Las defensas tienen un plazo para recurrir en Recurso Extraordinario ante el STJER. Si bien el estándar del doble conforme ya está cumplido (sentencia en primer grado y confirmación en Casación) aducen violaciones de índole constitucional, lo que les permitiría seguir recurriendo y dilatando los tiempos a fin de conseguir la tan ansiada prescripción de la causa.
Los hechos
A principios de diciembre de 2013, un grupo de efectivos policiales tomaron la Jefatura Central de Policía de Concordia, abandonaron funciones y dejaron a la ciudad librada a su suerte. Una jornada signada por el caos, el miedo, la violencia y la extorsión hacia autoridades y la sociedad en su conjunto que derivó en actos de vandalismo y saqueos por zonas que quedaron liberadas y en la muerte de ciudadanos concordienses en episodios confusos.
