El dirigente mercantil reconoció que “en otros lugares del país han arreglado de otras maneras, por eso no están con medidas en este momento”. Pero subrayó que “la empresa puede pagar muy bien este aumento que se ha conseguido. Es mas, el 14% se había conseguido y el 4% (restante) se iba a seguir negociando hasta fin de año”, señalando que por parte de los trabajadores están dispuestos a dialogar. Pero la firma “no quiere pagar porque puede sufrir un efecto cascada, en aquellos lugares del país que no han arreglado de la mejor manera”.
Durante el fin de semana los trabajadores concordiense volvieron a lograr que las dos sucursales locales cierren sus puertas, ya que ellos estaban de asamblea.
Sobre estas protestas, Simonetti insistió con que “nosotros iniciamos una medida porque no cumplieron con la palabra empeñada, que era por el aumento del 14% que se daba para los supermercados, el cual iba a figurar en el recibo de haberes”. Destacó que en el último recibo “no se lo ha liquidado y lo quieren seguir pagando de la misma amanera”. Asegurando que “nosotros, conjuntamente con el personal, hemos tenido varias asambleas y no están dispuestos a aceptar de esa manera. Porque es un pago en negro”.