El cálculo se realizó en base a las demandas que llegaron desde las propias escuelas al Consejo General de Educación (CGE) en diciembre de 2003. En toda la provincia se necesitan 695 aulas comunes. Luego se suman requerimientos de salas de profesores, de música, laboratorios, salas de ciencias sociales y espacios para nivel Inicial, lo que da un total de 1.000 aulas.
La ecuación hecha en base a las aulas requeridas y el promedio de alumnos por aula, detalla que el déficit de infraestructura afecta a 20.850 alumnos. Se requieren alrededor de 45 millones de pesos, la mitad de la inversión total necesaria. Sólo en el departamento Paraná, el déficit afecta a cerca de 4.000 alumnos, y satisfacer esa demanda requeriría invertir 19,7 millones de pesos.
Datos estimativos
Alfredo Malatesta, responsable del área Infraestructura Escolar del CGE, afirma que los datos sobre déficit de aulas y necesidades de inversión son “sólo estimativos”.Falta “chequear todo en terreno”. La evaluación in situ, dice el funcionario, daría pie a dos caminos: reacomodar las división en los distintos turnos (“puede haber saturación en uno, y espacio en otro”, afirma), y, cuando ese camino no sea posible, “habrá que pensar entonces en la construcción de nuevas aulas”.
Así pues, Malatesta relativiza el número exacto de alumnos con problemas de ubicación en las escuelas por cuanto, asegura, “no todas las divisiones funcionan con su capacidad colmada”, ni tampoco “todos los alumnos que empiezan en un año, continúan en el otro”.
El funcionario plantea que “el problema de la deserción de los chicos hace que de repente hoy arrancás con dos cursos de 60 alumnos, y al año siguiente, tenés dos cursos con menos alumnos, de 20 a 22 cada una”.
Por su parte, desde el CGE aseguran que el Estado no está en condiciones de satisfacer en lo inmediato lo que hace falta, aunque señalan que ya se están dando algunos pasos en ese sentido. Al respecto, citan el plan de reconstrucción de escuelas, que ya alcanzó a casi un millar de establecimientos, tarea que todavía continúa. A eso, se añade la inversión nacional contenida en el plan de construcción de 700 nuevos edificios, de los cuales 33 corresponden a Entre Ríos.
Sin mobiliario
El Taller Industrial Antequeda, el organismo encargado de satisfacer la demanda de mobiliario de las escuelas, está hoy prácticamente paralizado por falta de recursos.
El problema tendría dos explicaciones posibles. Por un lado, los conflictos gremiales suscitados a raíz de la incómoda situación en que quedó un grupo de trabajadores contratados y cuya situación fue observada por el Tribunal de Cuentas (ver aparte), y por otro la difícil relación que mantiene el responsable del Taller, Víctor Grandoli, con la titular del área contable del Consejo General de Educación (CGE), Alejandra Bría.
El tema de la falta de recursos con los cuales poner a andar el Taller Industrial ya habría sido puesto en conocimiento de las máximas autoridades provinciales, aunque hasta el momento no tendría solución. Por esa razón, dicen los funcionarios del área, la actividad en el organismo es prácticamente nula a la espera de recursos.