El director del hospital adelantó que en función de la demora que provocaron los paros, se van a reprogramar las cirugías y se van a adelantar las que tienen mayores riesgos en la espera. Posteriormente se va a intensificar el trabajo para tratar de normalizar los turnos que normalmente tienen una demora por la inmensa demanda, cuestión que ocurre en todos los hospitales.
Sobre el reclamo que mantuvieron al menos por dos semanas, el médico expresó: «me parecía injustificada la medida tomada porque fue una decisión muy extrema, a pesar de que hemos reconocido que todavía falta mucho para alcanzar las condiciones ideales de trabajo”.
En cuanto a la llegada del capnógrafo, Bertelotti señaló que esta situación «se ha resuelto mediante un alquiler hasta tanto se haga la compra correspondiente y con eso los quirófanos estarían trabajando en mejores condiciones».