Los últimos buques de gran porte que ingresaron al puerto de Concepción del Uruguay cargaron algo más de 9.000 toneladas, un ejemplo de las posibilidades que brindaba esta terminal en aceptables condiciones de navegabilidad, y que hoy son sólo un recuerdo ante los escasos 16 o 17 pies de profundidad que presentan varios de los pasos críticos río abajo.
La nueva modalidad de transporte usada ahora en La Histórica es del tipo feeder, un viaje de cabotaje que carga los contenedores en Concepción del Uruguay y los traslada hasta el puerto de Montevideo, desde donde salen en ultramarinos hasta su destino final.
“Estamos soportando con un enorme esfuerzo personal y de capital este emprendimiento que, hasta la llegada de la crisis mundial venía en una curva ascendente y prometedora, pero que cayó a niveles de supervivencia hasta estas últimas semanas que parece comenzar a recuperarse lentamente”, reseñaba ayer a UNO, el capitán Marcelo Gadea, responsable de la empresa Logisur, encargada de la logística del trabajo en puerto.
Las cifras. El monto del dinero movilizado en el puerto de Concepción en torno de esta actividad está cercano al millón y medio de pesos, “un logro que beneficia a mucha gente que hoy está trabajando, y que hace algunos meses estaba sin ninguna actividad a la vista”.
Casi 400.000 pesos se han pagado en jornales por actividades que incluyen carga, descarga de los contenedores y el consolidado de los mismos, esto es el llenado de los containers con la mercadería a exportar.
“Hay más posibilidades, se puede hacer, y estamos preparados para cuando esta situación se revierta, la crisis no va a terminar con el mundo, esto va a pasar, y nosotros queremos seguir generando trabajo en este puerto”, remarcó Gadea.
Esta empresa actualmente alquila la grúa utilizada para la carga y descarga de los contenedores, como así también la grúa que acomoda los containers en el predio de acopio o en los camiones.
En este concepto se lleva invertido más de medio millón de pesos, a lo que hay que sumar 112.000 pesos en prácticos, casi 120.000 pesos al puerto, obras, combustible y otros costos.
Las cargas. El arroz ha sido la estrella de las exportaciones en los contenedores que salen desde Concepción.
Hasta la semana pasada eran 18.625 toneladas la cantidad de arroz de toda la provincia que utilizaron esta modalidad para salir de la región.
En el próximo embarque ya se contabiliza mercadería proveniente de La Paz, que cruza toda la provincia para salir por este puerto, “el puerto natural del arroz entrerriano”, según marcan los entendidos en el tema, y los mismos grandes molinos arroceros entrerrianos.
Los contenedores de Mediterranean Shipping Company (MSC), la empresa más grande del mundo en el rubro, son los utilizados por este transporte, al que se suman otros de otras empresas.
Unas 200 toneladas de tableros de madera manufacturada, provenientes de la fábrica Masisa, instalada en Concepción del Uruguay, también han utilizado este sistema de embarque, al igual que 200 toneladas de postes de pino, del norte correntino.
“Ahora se abrió un panorama distinto con la industria avícola, que se mostró muy interesada en este último tiempo, ya que las ventajas competitivas de nuestro puerto le serían muy convenientes para exportar su mercadería”, destacó Gadea.
Las instalaciones cuentan, además, con las conexiones para reefers, esto es contenedores refrigerados para mercadería que necesita mantener la cadena de frío a lo largo de todo el viaje.
Una alternativa a la falta de respuesta por el dragado
El sistema de transporte de cargas mediante contenedores es hoy la modalidad imperante en todos los puertos del mundo. Prácticamente todo se puede trasladar en contenedores, y esa fue la alternativa que Concepción del Uruguay encontró a la falta de respuestas al pedido de dragado a 23 pies que necesita el puerto para que ingresen los ultramarinos, tal cual lo hicieron hasta la década pasada, donde centenares de buques cargaban mercadería que incluso llegaban desde Paraguay.
Hoy la navegabilidad sólo es posible para buques de pequeño porte, y dos de ellos, el Coraje y el Lucero, ambos de bandera uruguaya, son los encargados de transportar semanalmente unos 70 contenedores desde este puerto argentino hasta la terminal de Montevideo.
El sistema está funcionando, el trabajo no es del antes, pero ya no es la nada o la inactividad absoluta a la que parecía condenado el único puerto argentino de ultramar sobre el río Uruguay.
Fuente: UNO