El acusado, sobre quien pesaba una orden de captura, llegó hasta la dependencia policial ubicada en Rivadavia al 1300 poco después las 12.35 y antes de ingresar declaró ante la prensa que lo aguardaba en el lugar: “Más vale que soy inocente”.
Con la detención de Favale, ya suman dos los apresados por el asesinato de Ferreyra, cometido el miércoles pasado en el barrio de Barracas tras una marcha de ferroviarios en las inmediaciones de la estación Avellaneda de la ex línea Roca, ya que ayer había sido arrestado Pablo Díaz, delegado de la Unión Ferroviaria.
La intención del presunto autor del crimen de entregarse a la Justicia fue adelantada esta mañana por su abogado Sergio D´Amico.
“Calculamos que al mediodía él se estaría entregando en Asuntos Internos de la Policía Federal”, había anunciado el defensor del hombre vinculado a la barrabrava de Defensa y Justicia.
También reveló que era “una decisión personal de Cristian (la) de presentarse en condición de detenido”, para ponerse a disposición de la jueza Wilma López, quien dispuso una orden de captura en su contra, sospechado de ser quien disparó el tiro que mató a Ferreyra en la desconcentración de una protesta por la reincorporación de despedidos de la ex línea Roca, el miércoles.
Ayer, el acusado fue buscado sin éxito en dos allanamientos realizados en la localidad
bonaerense de Florencio Varela poco después de la primera detención del caso, la de Pablo Díaz, delegado de la ex línea Roca y dirigente de la Unión Ferroviaria.
Asimismo, el letrado indicó, en declaraciones a la señal de noticias TN, que Favale “trabajó hasta el año pasado en la Unión Ferroviaria, pero actualmente ya no pertenecía a este gremio”. Luego, en diálogo con C5N, señaló que, según le contó su cliente, le habían ofrecido “volver a ingresar” al sindicato y que por eso concurrió a la marcha que buscó impedir un corte de vías.
Por otra parte, D´Amico afirmó que su cliente “niega rotundamente” haber estado armado y agregó que Favale le contó que “en el lugar estuvo, pero no es el autor material del hecho”.
“El lo que me transmite es haber reconocido haber estado en la marcha pero no haber estado armado y no haber sido el autor del disparo” que terminó con la vida de Mariano Ferreyra, agregó.
Sobre el grado de imputación que pesa sobre su cliente, el abogado del acusado explicó que aún no tuvo acceso al expediente por estar bajo secreto de sumario pero que “algún elemento deberá existir para haber dispuesto la orden de detención sobre él”.
