Pimentel describió una serie de hechos en los que integrantes de la APDH fueron abordados en la vía pública, amenazados e inclusive golpeados, y notificó que ese organismo realizó un Habeas Corpus que tramita en el Juzgado Correccional N° 2.
El gobernador instruyó inmediatamente al Secretario Carlotto que arbitre los medios institucionales y políticos al alcance del Ejecutivo, y que aborde todas las articulaciones necesarias para garantizar el acompañamiento del Estado provincial a los integrantes de la APDH y a sus familias.
Carlotto explicó que los hechos que relató Pimentel “presentan características similares y sistematicidad, cuestión que nos preocupa profundamente y nos impulsa a dar respuestas concretas e intensificar el trabajo".
El secretario de Estado afirmó que el gobernador Scioli “calificó estos hechos como inadmisibles y nos pidió que, con urgencia, abordemos esta situación específica en articulación permanente con el resto de las áreas del Ejecutivo que tienen competencia en problemáticas de este tipo”.
“Se trata de acciones intimidatorias que presentan reminiscencias mafiosas. A esta altura de nuestro desarrollo democrático resultan inaceptables, y en línea con el pedido explícito del Gobernador vamos a reforzar nuestra responsabilidad política e institucional en función de este caso en particular”, agregó Carlotto luego del encuentro.
"Este tipo de actos son típicos de los grupúsculos antidemocráticos que aun persisten en nuestra sociedad; son personas que desprecian los derechos humanos y que, quizás, tomen coraje para hacer este tipo de cosas al escuchar a algunos dirigentes políticos decir barbaridades en los medios. Pero los argentinos/as ya han elegido un camino de defensa y protección de los derechos humanos, y condenan socialmente a aquellos que se apartan de él", enfatizó Carlotto.
