Durante la visita de la delegación de la misión comercial a Venezuela y EE UU, el gerente general del frigorífico Santa Elena, Martín Di Giacomo, se reunió con el titular de CASA, Rodolfo Marco Torres, para finiquitar la venta de cortes de carne vacuna congelados envasados al vacío.
“Esta es la primera vez que venimos a este mercado con la planta habilitada para exportar, por lo cual dejamos toda la documentación necesaria y en 30 días nos transformarnos en proveedores de Venezuela en un importante volumen”, dijo el empresario.
“Estamos muy contentos porque recibimos la autorización para poder ser exportadores de carne a Venezuela, después de una inspección bastante intensa en julio pasado”, dijo el representante del frigorífico.
Por su parte, Urribarri dijo que estaban haciendo lo que corresponde al Estado. “Promover y apoyar a nuestras empresas para su desarrollo como para la expansión de sus mercados”, señaló. Y aseguró que el caso del frigorífico Santa Elena es paradigmático. “La política cumplió la misión de abrir las puertas de un mercado atractivo para la economía provincial”, expresó el primer mandatario al recibir la confirmación de la noticia.
Cerca de 200 personas trabajan actualmente en la planta que se dedica a procesamiento de productos y subproductos de origen bovino, entre ellos cortes frescos, enfriados y congelados; conservas enlatadas (corned beef y picadillo), carne cocida congelada, primer jugo bovino, menudencias vacunas, extracto de carne, harina de carne y hueso, y sebo líquido industrial.
La planta de elaboración tiene 60.000 m2 de superficie, ubicados en un predio de 22 hectáreas, con capacidad para elaborar más de 250 toneladas de productos terminados por día, entre frescos y termoprocesados, y con la infraestructura necesaria para llevar a cabo esa tarea.