En tanto, una delegación de citricultores tucumanos viajará a Bruselas la próxima semana para reunirse con autoridades fitosanitarias de la UE a fin de evitar que se limite el ingreso de fruta argentina a ese mercado.
No obstante, la Asociación Tucumana del Citrus (ATC) aclaró que la misión europea que llegará el mes próximo, no lo hará debido a que se detectaron mandarinas de Entre Ríos con cancrosis en España, sino que ésta fue programada en marzo pasado, cuando el Comité de Bruselas dispuso el cese de la medida cautelar impuesta por España a fines de 2003 contra la fruta argentina.
Por último, Sánchez Loria dijo que no es práctico que las citriculturas del Litoral y del NOA se confronten ante las exigencias de la UE, ya que “el problema no es con los españoles en general, sino con los valencianos, porque para ellos parte de la fruta sudamericana compite con ellos, dado que ingresa cuando tienen todavía naranjas y mandarinas en el mercado”, indicó.