Bordet explicó que el espacio nativo, que ocupa un predio de 25 hectáreas, se dividirá en tres áreas: recreación ó de esparcimiento, educativa y de producción. “El área educativa tiene una proyección interesante donde se va a tratar de trabajar con las escuelas y con cualquier gente que esté interesada en desarrollar actividades”, precisó. Por su parte, en la sección productiva, se podrá generar “vegetación nativa, propia de la región”.
Los impulsores del proyecto planean habilitar el sector del jardín botánico propiamente dicho. En cuanto al tiempo que insumirá la tarea, aseguró que demandará “meses, pero no muchos”.
Sobre el aporte del Parque Nacional “El Palmar”, los creadores de la iniciativa disponen de la tutela, la experiencia, y el material en lo que respecta a plantines y vegetación. “El Parque va a desarrollar toda la actividad de venir a asesorar y trabajar en conjunto con nosotros, sobre el diseño del jardín botánico, y el abastecimiento de todos los ejemplares”, finalizó.