La Municipalidad de San Salvador decidió comprar dólares y guardarlos bajo siete llaves en una caja fuerte en una entidad bancaria.
La compra de la moneda extranjera se hizo con los excedentes fiscales que generó la comuna tras un aumento impositivo. Se estima que en la caja existirían unos 290 mil dólares, que deberían estar destinados a obras públicas.
Lo curioso del caso, es que el propio Municipio decidió no sólo comprar la moneda estadounidense sino también guardarlo en una caja de seguridad en el Nuevo Banco de Entre Ríos SA, donde sólo pocos autorizados pueden tener el control de esos fondos.
Hace un año que ese dinero está inmovilizado y según una presentación del bloque de concejales de la Unión Cívica Radical (UCR), la comuna sufrió una pérdida financiera de unos 34.000 pesos en concepto de intereses, por un “erróneo manejo de los fondos públicos”.
De acuerdo a las estimaciones de los concejales de la oposición, en la caja de seguridad debería haber alrededor de 290 mil dólares, pero como es un dato incierto porque no existe control al respecto, solicitaron a través de un pedido de informes, que el intendente Hugo Vilhem, detalle “qué cantidad de moneda extranjera se halla depositada en la caja de seguridad de la sucursal Colón del Nuevo Bersa al 30 de junio de 2005”.
En el caso que se confirme el monto de 290 mil dólares, los ediles radicales calcularon que la pérdida que sufrió el Municipio por haber inmovilizado esos fondos, ascendería a los 34 mil pesos en concepto de intereses. “Cualquier entidad bancaria hubiera pagado por la colocación de ese dinero a plazo fijo, ese monto”, denunció el jefe de la bancada radical Hugo González.
“Las cajas de seguridad no tienen control alguno, salvo de quien maneja la llave de la misma y no genera rendimiento financiero de ningún tipo porque se trata de dinero que permanece inmovilizado”, indicó González, al tiempo que agregó que ese dinero permaneció en las arcas bancarias sin utilizarse y sin informarse en detalle cuál era la finalidad de la medida, aunque en
Los considerandos de la ordenanza se dice que se trata de recursos afectados a obra pública.
“Lo que nos preocupa es saber cuánto dinero hay en la caja, pero además, tenemos conocimiento que no existe ningún seguro contra robo o incendio ni se realizó arqueo o conteo del dinero con constatación de escribano público como habíamos solicitado cuando se autorizó la compra de los dólares, en el 2004”, acotó el jefe del bloque de concejales de la UCR.
Para el bloque opositor, “si el dinero hubiese estado depositado en una cuenta a plazo fijo, sólo con los intereses el Municipio hubiese podido comprar más de 4.000 metros cúbicos de ripio para las numerosas calles intransitables de la ciudad”, según calculó Martín Gerard.