Si bien hay un marco regulatorio que impide a Salto Grande proveer energía en forma directa y a un precio diferencial a la Cooperativa Eléctrica sino que es enviada a la Nación para su redistribución luego a todo el país, Rotman dijo que Salto Grande produce el 15 o 16 % de la energía que se consume en el país. Por esa razón se preguntó “¿Por qué razón no podemos meter la cuchara nosotros? ¿No podemos tener alguna ventaja?”.
En tal sentido, recordó que cuando se construyó la represa se inundaron 70.000 hectáreas de desarrollo productivo. Y además un sector de trabajadores de la obra que no era de Concordia generó un núcleo de desocupados en la ciudad.
“No es una injusticia tener una ventaja, Salto Grande se hizo para desarrollar la región. Si tuviéramos luz promocional como estaba proyectada en Concordia y Federación, muchas empresas electro-intensivas se radicarían acá. Y empresas que se radican dan mano de obra y hace falta que demos mano de obra genuina, no mano de obra artificial”, mencionó.
Más adelante, hizo referencia a la falta de agua en verano que afecta a varias zonas de la ciudad. “Hay que buscar la forma de que Salto Grande cumpla con la deuda que tiene con la región. No puede ser que Concordia tenga el 40 o 50 % de la población en verano se quede sin agua. Tiene que juntar en balde a la noche cuando hay poco consumo para consumir al día siguiente”, dijo Rotman.
En ese sentido, recordó que la prioridad número 1 de Salto Grande fue la de obtener agua para el uso doméstico y sanitario. “No se cumple absolutamente nada”, sostuvo.
En octubre pasado, desde Obras Sanitarias, se señalaba a DIARIOJUNIO que en materia de distribución de agua potable, Concordia se encuentra por encima de la media nacional. En el censo 2010, el índice de cobertura en el país de la red pública de agua y cloacas era del 83 % en el primer caso y del 53 % en el segundo. En cambio, Concordia tiene una cobertura de agua en promedio del 92 % y de cloacas está en el 88 %.
Al respecto cabe acotar que la ciudad tiene un consumo de agua que ronda los 550 litros por habitante por día. Es más del doble de la exigencia mundial que establece la OMS (Organización Mundial de la Salud) que ronda los 250 litros. En consecuencia la deducción de las autoridades de Obras Sanitarias es que hay mucho derroche de agua.
El legislador recordó que existe un proyecto de un acueducto desde hace mucho tiempo que no se llevó adelante y se manifestó contrario al proyecto de otro acueducto en el norte entrerriano por U$S 430 millones sin licitación. “Hay cosas para hacer en la Legislatura”, manifestó.
Más adelante, el legislador también se refirió a la navegación. Abogó porque los productos de la zona sean transportados por vía fluvial a los puertos internacionales. Ese servicio tendría un costo bastante inferior al flete mediante camiones. Además de reducir los riesgos de accidentes en las rutas con su secuela de muertos y heridos. “Hay 20 muertos por día por accidentes en la Argentina”, precisó.
“Teniendo un río tan importante, ¿como no lo vamos a hacer navegable? ¿Cómo no vamos a idear algo para navegar aguas arriba del embalse para llegar hasta el sur de Brasil para que ésta sea la verdadera ruta del Mercosur?”, señaló.
“Si se hace el proyecto original, hace falta terminar la exclusa”, indicó el diputado. De todas formas, sostuvo más adelante que hay un proyecto consistente en una especie de by pass fluvial para que los barcos vadeen la represa a través de un arroyo ubicado en el vecino país.
Uno de los proyectos con más viabilidad es utilizar un arroyo, llamado San Antonio, como base para la solución. La construcción nace desde el río Uruguay, se hace un canal de conexión con el arroyo y éste se inunda en dos lugares, con dos represas, para hacerlo navegable. De ahí el arroyo corre paralelo al río Uruguay hasta el lago de Salto Grande.
“Logramos abortar la privatización en los 90 con Menem cuando hicimos manifestaciones y quedó para el Estado. Ahora tenemos que pelear para que cumpla con los preceptos fundacionales”, destacó.