"Su objetivo consiste, de hecho, en conseguir una división de Siria, un enfoque que promueven también ciertos aliados de EE.UU.”, alertó Lavrov en entrevista con la revista italiana Panorama.
Citado por la agencia Sputnik Nóvosti, el canciller criticó que la Casa Blanca mienta al declarar que su único objetivo es expulsar a los terroristas de Siria, cuando Washington “se está estableciendo activamente en la orilla oriental del Éufrates”.
Estados Unidos mantiene tropas en suelo sirio, sin permiso de Damasco, desde hace varios años bajo el argumento de su lucha contra la organización terrorista autodenominada Estado Islámico (Daesh en árabe).
Lavrov fustigó la ”línea destructiva” de EE.UU. y sus aliados, entre los que nombró a Francia y Reino Unido, los tres países que bombardearon el pasado 14 de abril a Siria por el “pretexto totalmente falso” de uso de armas químicas por parte del Ejército sirio.
Ante esto, expresó su "profunda preocupación" por el hecho de que EE.UU. y sus aliados "desprecien abiertamente el derecho internacional, la Carta de la ONU" y se permitan "entrometerse en los asuntos internos de otros países e incluso intentar derrocar los Gobiernos en esos países".