“Por supuesto que la industria farmacéutica no esta para nada conforme con este proyecto, seguro que no” subrayó el doctor Alberto Rotman, y si bien aclaró que no recibió presiones cuando impulsaba el proyecto desde su cargo de Secretario de Salud, recordó que desde las empresas privadas que elaboraban medicamentos “nos decían que estábamos equivocado en los costos”. Lo que se podía interpretar como “que se tocaban algunos intereses, intereses que se hubieran afectado con esta planta de medicamentos”.
El funcionario del gobierno Montiel también calificó como “un disparate” la denuncia del gobierno provincial, sobre una inversión de 22 millones de pesos que no habrían estado presupuestados.
Rotman explicó que “la parte administrativa era responsabilidad del FINVER, a cargo del ingeniero Carlos Aranguren, un hombre de bien que saldrá a hacer todas las aclaraciones suficientes y necesarias”, según anticipó. Insistiendo con que en realidad “son todos peros, para no llevar adelante esta fábrica de medicamentos”.
En ese sentido dijo que no sabía “como interpretar esta medida, porque en la práctica los resultados son los que mandan. Acá se ha parado una planta de medicamentos que traería un ahorro muy importante a las arcas del gobierno. Y que además podía brindar a los hospitales medicamentos de primer nivel”. Subrayando la confiabilidad de ser fabricados por el Estado, ya que “si dice 50 miligramos tiene 50 miligramos, si dice 100 miligramos son 100 miligramos”.
A lo que se suma que “estamos comprando mucho mas caro a los proveedores privados” en una valoración “que queda para que lo interprete quien lo lee, o como lo lee”.
Genéricos: un proyecto nacido de la crisis
Alberto Rotman recuerda que la elaboración de medicamentos genéricos una de las consecuencias de la crisis económica que afecto a la provincia y “como fruto de la crisis, los hospitales comenzaron a elaborar genéricos”.
El pionero fue el hospital Justo José de Urquiza de Concepción del Uruguay, al que luego se sumaron los de Gualeguaychú, Crespo y Concordia.
En diálogo con este medio afirmó que “estaba toda la aparatología que se compraba a través del programa para el desarrollo, abalado por Naciones Unidas” y que incluso se había logrado “la donación de insumos y medicamentos para un plazo de 2 años. Por lo que estaba planificado, a través de las Naciones Unidas, la compra de todo esto para el 2004 y el 2005”.
En ese marco, las proyecciones preveían que a mediados del 2004, se bederían haber estado fabricando mas de 40 genéricos. “Entre comprimidos, pomadas, cremas y líquidos como jarabes, etc., y esto iba y llevar un ahorro en los gastos de la provincia, en no menos de 12 millones de pesos anuales, en aquel momento, hace dos años”. Por lo que un recalculo de estas cifras, teniendo en cuenta que “los medicamentos han aumentado un 100% en sus costos, entonces podemos calcular que (la fabricación propia de medicamentos) llevaría a un ahorro anual de casi 20 millones de pesos anuales”. Destacando que “ese monto es muchísimo” dinero para la cartera de Salud, Rotman preguntó “¿Usted sabe lo que es ahorrar 20 millones en un tema que es tan sensible como los medicamentos”.
