Uriel sería quien apareció en un video con la cara cubierta con una máscara exhibiendo un revólver y un cargador con balas, mientras amenazaba con «dar todo plomo» a quienes no devuelvan los objetos que se llevaron de unas viviendas al momento de atacarlas a palazos, pedradas y martillazos el lunes, a pocas horas del crimen de Máximo «Maxi» Jerez, de 11 años, ocurrido durante una balacera narco en el asentamiento Los Pumitas, del barrio rosarino Empalme Graneros.
Por ahora, hubo allanamientos en diversos puntos de la ciudad, pero no dieron con su hallazgo y captura. La policía mantiene las tareas de investigación.
En tanto, efectivos de la Policía santafesina y de las fuerzas federales de seguridad custodian las viviendas de los familiares de «Maxi». Así lo confirmó este jueves el ministro de Seguridad de Santa Fe, Claudio Brilloni, durante una recorrida realizada por la zona.
Ante la prensa, el funcionario contó que los domicilios son tres, que ya estaban a resguardo de la Policía provincial y que, desde el miércoles, con el arribo de 50 gendarmes a ese barrio, son ambas fuerzas las encargadas de dar protección a los familiares a raíz de las amenazas efectuadas.
El video de Uriel se dio a conocer luego que familiares del chico de 11 años, quien murió en la balacera, saquearon e incendiaron la casa de un hombre conocido como «El Salteño», al que relacionan con una banda narco, poco después que intentaran lincharlo y fuera detenido por la policía.
Según el fiscal Adrián Spelta, «El Salteño», quien fue detenido junto a su esposa y su hija, es sindicado como puntero local de la banda narco que fue atacada por otra, en el tiroteo que derivó en la muerte de Máximo y que otros tres menores resultaran heridos.
