Los dos chicos fueron aprehendidos en flagrancia, cuando apenas salían de la vivienda a la que habían ingresado a robar, según la información aportada por la policía a DIARIOJUNIO.
A diferencia de ocasiones anteriores, ahora Romerito ya no es menor inimputable, ya que – pese a la desinformada queja que se promueve desde los medios dominantes- los menores de edad son punibles desde los 16 años, solo que se prevé para éstos penas de menor cuantía. En rigor, la regla en estos casos es que de hallarse culpables solo se le impongan medidas tutelares, aunque de ser insuficientes las mismas, se pueden ordenar penas privativas de la libertad, que deben ser la mitad de las penas que el código establece para mayores de 18.
Y por esta razón quedó alojado en la comisaría del Menor y la Familia, desde esta mañana cuando fue aprehendido en el barrio Nébel. Pocos minutos después de la detención, se hizo presente el abogado de la familia, Osvaldo Sarli (ya conocido por haber representado legalmente a los hermanos del chico en casos similares), quien presentó un recurso de Habeas Corpus, solicitando la libertad inmediata del chico, cosa que fue denegada por el juez de Garantías, entendiendo que la Fiscalía tenía elementos suficientes para mantenerlo aprehendido. Puesto que el menor ya está en edad de ser juzgado y además del delito flagrante, la fiscalía presentó elementos que certifican la reincidencia.
Según precisó Dri, el ministerio Publico Fiscal solicitará la internación del menor, que ya en marzo de este año fue internado por tres meses en una institución dispuesta por el Copnaf, y de acuerdo a los informes de este organismo, “el chico progresó muchísimo mientras estuvo bajo las medidas tuterales”
Para Dri, la medida no es solo en función de hacer justicia por el delito cometido sino además, de darle al menor una alternativa que posibilite su inserción social armoniosa. Y hasta en un aspecto más crudo; evitar que termine de la peor manera. El clima social también es delicado, puesto que los vecinos del barrio el Arenal, manifiestan insistentemente estar cansados de los robos que, en general, atribuyen a toda la familia del muchacho.
Según precisó además el fiscal, el otro menor, de 14 años aún inimputable, está a disposición del COPNAF; que es el organismo que debe abordar su situación para evitar que siga los pasos de su compañero.
Este chico, estaba en situación de calle y tenía un pedido de localización, que fue radicado por su madre días atrás. El caso, vuelve a poner en debate un tema que DIARIOJUNIO viene tratando: Los menores en situación de calle o que a corta edad, se ven librados a la buena de sus escasas capacidades para subsistir, sin haber terminado ni la escuela, ni siquiera con un oficio y con un núcleo familiar inexistente o degradado.
Chicos que son excluidos de todas partes, y que solo encuentran algo parecido a la contención en avivada de algunos mayores, que se aprovechan de su situación para beneficio personal.