La prisión preventiva por 90 días es “una medida cautelar”, manifestó. No obstante, también manifestó que hay una “alta probabilidad” de que se esté en presencia del autor del homicidio. Pero eso “hay que demostrarlo en el juicio” junto con otras pruebas. “Hay evidencia que lo compromete seriamente y que lo indican, con la probabilidad del caso, como el autor responsable de este grave homicidio”, manifestó Rodríguez Allende. Asimismo, indicó que faltan muchas pruebas aunque los indicios recolectados hasta ahora son “muy serios”.
Para la querella, no es de importancia que los tres meses los pase en la Unidad Penal Nº 3 o en la Alcaldía. Al conocer la sentencia, Marsicano dijo que no quería ir al penal, “Me van a matar porque tengo plata”, dijo a la prensa el acusado. Minutos después, Funes Palacio accedió al pedido. “No hay problema, los 90 días tiene que estar con prisión preventiva tal cual nosotros lo requerimos así se puede producir demás pruebas que, evidentemente como viene encausada la presente nos está demostrando que el autor responsable es Marsicano”, dijo Rodriguez Allende.
Varias veces el abogado paranaense se refería a la “complejidad de la causa”. Y explicó que se basaba en las características del homicidio. “Fue a puertas cerradas, entre amigos, en un lugar descampado. Todo esto hace a la complejidad de la causa”.
Durante la lectura de los argumentos en los que basó su decisión de dejar al productor agropecuario tras las rejas, Funes Palacios enumeró varias pruebas traídas por el fiscal: la filmación de las cámaras del drugstore “La Mona” ubicado a escaso metros del domicilio de Marsicano que los ubica junto a la víctima a pocas horas de deceso, el dermotest positivo en uno de sus brazos, las excoriaciones en los brazos producto de introducirlos a través del mueble profanado donde se guardaba el dinero, las astillas de madera en la camisa secuestrada al acusado en su casa, la sugestiva aparición de dinero que en la casa del productor, etc.
Limpieza de huellas en vasos y botellas, el arma homicida arrojada al agua, el hallazgo de las balas del mismo calibre en la casa de Marsicano fueron otras de las evidencias tomadas en cuenta por el Juez de Garantías.
Respecto de lo alegado por el defensor, Iván Dri, quien apuntó a la falta de lógica que explique el asesinato, Funes Palacios dijo que si la conducta humana fuera lógica: “no estaríamos todos acá sentados preguntándonos como son estos aconteceres”. “La conducta humana se contradice, doctor, permanentemente. El hombre en muchos aspectos es absurdo viviente”, le indicó el magistrado.
Asimismo señaló que muchas veces los homicidios se producen en los domicilios particulares y provocados por la interacción entre la víctima y el victimario. “La pareja delictual en los homicidios se conoce, tiene vínculos, hay sentimientos, hay relaciones”, dijo basándose en estadísticas. “Por eso no parece absurdo esto”, señaló. En cuanto a la explicación de Marsicano, de que las balas halladas eran de su padre, dijo Funes Palacio que era una casualidad “terrible”.
Más adelante, el magistrado señaló que hay quienes se creen “libres de toda sospecha” y efectúan tareas colaborativas con la investigación pero en realidad lo que buscan es “ocultar evidencia”.
Funes Palacio, en vista de toda la evidencia, dijo que Marsicano “esta vinculado seriamente comprometido” y observarlo de otra forma es “realmente un trabajo titánico”. Por ello, reconoció el trabajo de la defensa en tratar de “remontar esta situación tan compleja”.
La posibilidad de enfrentar una condena a cadena perpetúa, para el juez de garantías, hace pensar que la persona acusada va a hacer resistencia a enfrentar el juicio e incluso a “la posibilidad de fugarse”, teniendo en cuenta que Marsicano tiene los medios para «eludir la acción de la Justicia».