En la Comisaría 6ta instalada en el Bº Illia y que tiene jurisdicción en esa zona del sudoeste de Gualeguaychú (dentro de pocos días allí tendrá acción la Comisaría 8va, de próxima inauguración) no contaban con ninguna constancia de que ese robo se hubiera producido, por lo cual comenzaron a actuar de oficio.
Ya desde hace bastante tiempo que los feligreses de la Capilla Santa Rosa y San Ramón temían que algún hecho delictivo se pudiera cometer en el templo, puesto que habían existido comprobadas amenazas telefónicas, advirtiendo esa posibilidad.
Incluso algunos robos en instalaciones de la Escuela Nº 94 «Fco Ramírez», como también en comercios cercanos (algunos realmente «saqueados») habían puesto en alerta a los vecinos, aunque seguramente que nadie imaginó que el robo en la capilla fuera de algo tan increíble como de parte del campanario. Claro está que lo que sacaron es de bronce, algo que tiene muy buena posibilidad de ser «colocado», porque hay compradores.
