Según declaró la pareja a Radio Máxima fueron «atados a la cama y nos pedían plata. Fueron muy cautos, se notaba que sabían lo que hacían. Si bien no hubo violencia ni maltrato, fue un momento muy complicado”, y agregaron que su bebé de 18 meses, y Raquel, la señora que trabaja con ellos, no sufrieron ninguna lesión.
Estiman que se robaron cerca de «5 millones de pesos» junto con celulares, una tablet, un televisor, un aire acondicionado, y calzados».
El jefe Departamental de Policía, César Primo, informó a R2820 que »en ocasión que las víctimas se hallaban descansando -un matrimonio con su bebé y la niñera-, fueron sorprendidos por tres encapuchados, portando armas de fuego, quienes le sustrajeron dinero en pesos y dólares estadounidenses, un televisor, dos teléfonos celulares, un aire acondicionado».
«Los delincuentes ataron a las víctimas y no sufrieron lesiones», confirmó Primo y agregó que «radicaron la denuncia e interviene el fiscal Lucas Pascual».
Suponen que ingresaron por la parte trasera del complejo tras cortar un alambrado. En el lugar trabajaron agentes de la Jefatura Departamental que llevan adelante la investigación para esclarecer el robo.