El secretario general de ATE, Oscar Muntes, expresó a través de una carta que el aspecto edilicio se encuentra cada día más deteriorado, calificando la situación como “paupérrima”. La semana pasada se desprendió “mampostería del balcón de acceso principal” y resaltó que los escombros que cayeron sobre la vereda pudieron causar una “situación grave e indeseable no sólo para los chicos que concurren a la residencia sino también a los trabajadores y gran cantidad de transeúntes que a diarios circulan por el lugar”.
Por otra parte, Muntes subrayó que está preocupado por la falta de personal. “Este punto se ha planteado desde hace tiempo y aún no hay definiciones motivo por el cual la carencia de trabajadores deriva en la sobrecarga de las compañeras quienes sufren el consecuente estrés y cansancio mental”, señaló en uno de los párrafos de la carta. Incluso, recalcó la falta de entrega de indumentaria de trabajo ya que las trabajadoras requieren de ropa específica para el cumplimiento de sus labores diarias.
A lo descrito anteriormente añadieron:
• En el hogar hay aspectos de seguridad e higiene que no se están teniendo en cuenta como el reiterado reclamo de instalar salidas, luces de emergencia y matafuegos.
• la falta de personal de mantenimiento que se encargue de las tareas específicas que surgen a diario en la residencia.
• La carencia de un equipo técnico cuyas tareas son fundamentales para el desarrollo, apoyo y recuperación de los chicos que concurren a la misma.
• La deuda a los trabajadores del adicional por Gripe A, pese a los reiterados reclamos y promesas relacionadas con su efectivización, hasta ahora no se cumplió el pago de un reclamo que data del año 2009.
• Los inmuebles literalmente brillan por su ausencia, el faltante es casi total, no se cuentan con los elementos dispensables y lamentablemente, los pocos que se encuentran están realmente muy deteriorados.
Por último, desde ATE le recordaron a Solanas que aún no visitó la residencia como prometió y, de paso, corrobore los puntos solicitados por los trabajadores y, fundamentalmente, adopte las decisiones que permitan las necesarias reparaciones del edificio y las respuestas concretas que requiere el personal.