Busti se refirió al dirigente del partido de Macri como “este de Todo por Concordia, como es que se llama, Saliva”. El dirigente de PRO definió al ex gobernador como un “chicanero serial” y admitió que las declaraciones forman parte de “los fuegos de artificio” de la política. De todas maneras, recalcó que no le parecían adecuados los términos en que se refirió a su persona. Y no negó que detrás de las mismas haya “algún tipo de resquemor”.
Saliva no negó las expresiones de Busti, quien negó haberse reunido con el dirigente de PRO. “Es cierto nunca se reunió conmigo”, confirmó y también descartó haber tenido algún tipo de contacto por otra vía indirecta. Es más, aseguró que tampoco hubo algún acercamiento con algún dirigente a nivel nacional. Y manifestó su desinterés en poder encontrarse en algún momento. “De mi parte, absolutamente ninguna”, sostuvo.
“El PRO crece en todo el país. Mauricio Macri es el candidato a nivel nacional y nosotros somos parte de esa fuerza. Somos la primera provincia fusionada a nivel país; hemos dado ejemplo con el tema de la juventud como hemos actuado; hemos sido uno de los primeros en usar las redes sociales para la comunicación del pensamiento nuestro y seguimos creciendo”, señaló.
“El problema del Justicialismo que lo arreglen entre Urribarri y Busti; el problema del radicalismo es encontrar a un candidato y nuestro problema es seguir creciendo. Estamos conformes con lo que estamos haciendo. De acá en más tenemos 355 días para la elección”, dijo en otro párrafo.
El análisis del escenario político para el partido, a partir de la desaparición física del ex presidente Néstor Kirchner, deja como saldo un “efecto neutro”. Según explicó, no cambió nada porque el gobierno dejó traslucir que seguirá con las mismas políticas “que había implementado en vida Néstor Kirchner”. “Si ese es el camino y la agregamos la conflictividad social y la inflación que son una serie de cuestiones que me parece que van a socavar el gobierno de Cristina Kirchner”, auguró.