Pucheta recordó lo sucedido un año atrás, cuando las inspecciones causaron profundo rechazo, llegándose al colmo de que un grupo de personas dieran vuelta una camioneta con inspectores dentro de ella. El funcionario aseguró que en no pocas oportunidades recibe algunos “avisos” al respecto de que la historia podría repetirse, aunque dijo que seguirán adelante con esta política implementada desde las altas esferas de los gobiernos nacional y provincial, en pos de vencer “el flagelo” de trabajo ilegal.
El funcionario consideró que se ha instalado una cultura del no pago y apuntó que, a pesar que sobre fines del año anterior y debido a las facilidades dadas desde el gobierno el altísimo índice de trabajo en negro había descendido, hoy los números se ubican nuevamente en cifras similares a las que denunciara .