El autor del proyecto es el concejal Alberto Zadoyko (FPV) quien lo presentó esta mañana. El párrafo más importante es el que establece que la retribución que el permisionario reciba siempre será de carácter “voluntario”. El edil dijo que de esa forma se evitará que exijan sumas que en algunos casos llegan a los $ 100, cifra que la caratuló como “una locura”.
“Yo creo que es necesario por los hechos que ahora se vienen dando. Ya no son hechos aislados que uno pueda decir que ‘esto no va a suceder más’. Varios han sido públicos y hay otros que cuenta la Policía en cuanto a denuncias que no han salidos en los medios. Tenemos que trabajar en forma urgente”, recalcó.
El edil dijo que se debe evitar que se incremente el número de ‘trapitos’ que hay en Concordia. Por ello, se deben registrarlos dentro de la subsecretaria de Seguridad. Por lo pronto, se debe realizar un censo tendiente a identificarlos. De esa forma, se puede saber quiénes están en determinados lugares y en que horarios. Esos datos contribuirían a la seguridad de los automovilistas y de los vecinos de las inmediaciones.
Los permisos serán precarios, personales e intransferibles, sólo para mayores de 18 años que acrediten ingresos insuficientes para la atención de sus necesidades y de su grupo familiar. Durarán un año y serán renovables por igual término.
El proyecto también establece que habrá una autoridad de aplicación, en este caso el Juzgado de Faltas, adonde los ciudadanos podrán acudir para realizar denuncias cuando los ‘trapitos’ exijan sumas de dinero en forma abusiva, acosen o coaccionen. Cuando ello suceda, el Juzgado podrá no sólo retirar el permiso otorgado sino que estará facultado a imponer una sanción económica que va de los $ 200 a 400 y uno o dos días de trabajos de utilidad pública.
El retiro del permiso también puede ser revocado cuando cometan alguna contravención o delito durante el desarrollo de su actividad.
Más adelante, la autoridad de aplicación deberá realizar un curso de capacitación para que sepan como ejercer la actividad apuntando a una “correcta atención al ciudadano”.
Los permisos serán otorgados por el municipio en lugares que sean delimitados oportunamente y los ‘trapitos’ podrán ayudar a mejorar el estacionamiento evitando maniobras riesgosas o que entorpezcan el tránsito.
Además dijo que es difícil trabajar en la materia dado los pocos antecedentes existentes en el país a pesar de que se trata de un problema vigente que va en aumento.