La escasez de precipitaciones se acentuó en el período octubre-diciembre que sumado a la elevada insolación, que arroja de noviembre hasta el presente un promedio diario de 11 horas 12 minutos de luz solar, superior en 2 horas 18 minutos por jornada de luminosidad normal del mes; temperaturas máximas muy altas, en promedio superior a los 30 grados, 3,6 grados más que el promedio histórico.
Uno de los fenómenos más determinantes ha sido últimamente la increíblemente baja humedad relativa ambiente, habiendo recabado índices porcentuales mínimos inéditos para la temporada, que en la mayoría de las jornadas descendieron del 30 %, con una marca mínima absoluta del 2% que corresponde al 6 de enero pasado.
La suma de todas estas situaciones consumieron con celeridad la escasa humedad contenida en el suelo, pasándose en pocos días de una situación preocupante, a otra que en estos momentos es crítica y con pocas, o en algunos casos con nulas posibilidades de recuperación, aún si se registraran lluvias muy importantes.