Desde la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (Farer), en tanto, José Carlos Basaldúa, su presidente, señaló que en nuestra provincia las estaciones “sólo le venden a sus clientes” y en “cantidades menores”.
El dirigente alertó que la situación podría agravarse en los próximos días porque se necesitará más gasoil para la siembra de maíz y en octubre por el regado de las plantaciones de arroz.
“Desde el Gobierno nos dicen que en 15 días se solucionará el problema porque comenzará a ingresar más gasoil desde el exterior”, consideró el dirigente.
Consultado sobre los motivos del desabastecimiento, Basaldúa aseguró que “en los últimos años no hubo inversión para aumentar la oferta de combustible y, paralelamente, aumentó la demanda y además se exporta cada vez más”.
El presidente de la Sociedad Rural de Gualeguay, Flavio Izaguirre, por su parte, dijo que en aquel departamento la realidad es la misma que en toda la provincia. “No hay gasoil y cuando se obtiene hay que pagarlo $ 1,70 o más”, se quejó el dirigente. En la ciudad de Gualeguay, incluso, las estaciones de servicio no venden más de $ 50 por vehículo, es decir entre 28 y 30 litros.
La situación, a juicio de Izaguirre, se va a complicar más cuando se generalice la implantación de granos gruesos. “Hasta ahora, por la falta de lluvias, la siembra de maíz viene muy atrasada, pero si llega a caer agua tampoco se va a poder arrancar porque no hay gasoil ni para medio día”, subrayó.
“La petroleras pueden decir todo lo que quieran, pero la realidad es que no entregan combustibles”, denunció el ruralista, quien además señaló que hay zonas en Entre Ríos donde el litro de gasoil se comercializa a $ 1,90.
REUNIONES
Por su parte, dirigentes de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) acudieron el jueves al Ministerio de Infraestructura para reclamar que se normalice el abastecimiento y pudieron reunirse con Vicente Serra, director nacional de Combustibles.
Según la entidad que agrupa a cooperativas agropecuarias, los funcionarios del Gobierno “atribuyen la escasez a problemas de logística de las empresas distribuidoras producidos, entre otros factores, por una presunta especulación frente a una coyuntura de mayores labores agrícolas y aumento de precios”.
Para la entidad, la situación podría ser aún peor ya que en este época del año existe una “mayor actividad” y por eso se demandará más combustible.
En un comunicado, Coninagro señaló que las autoridades nacionales prometieron medidas para afrontar la crisis y una de ellas es la importación de este combustible “con el arribo de varios embarques a partir de la semana próxima”.
Según Daniel Asseff, economista de Coninagro, el complejo de cereales y oleaginosos, en cuanto a siembra y cosecha, es el que mayor consumo de gasoil emplea, con 2.019 millones de litros. Le sigue la ganadería, con 296 millones; los cultivos industriales, con 198 millones; los frutícolas, con 172 millones; los hortícolas, con 61 millones, y la forestación, con 15 millones de litros.