«Los productores citrícolas no estamos de acuerdo con el trabajo en negro sino que exigimos leyes para poder cumplirlas, porque a ningún productor le divierte trabajar fuera de la ley, si lo hace es porque no tiene alternativa”, de esta manera, los empresarios de la fruta salieron al cruce de las denuncias efectuadas por la Confederación General de Trabajadores (CGT) respecto a las condiciones en la que están trabajando los operarios en las quintas citrícolas de la provincia.
En un comunicado, enviado al Gobierno y a los dirigentes sindicales, los productores recordaron que entre 2001 y 2004, en la provincia desaparecieron más de 7.000 productores de distintos rubros. “No queremos seguir engrosando la lista, es por esto y por mucho más que pedimos tengan altura y consideren nuestra realidad, no queremos desaparecer como productores y como economía regional que somos, es por esto que también contamos con el apoyo de nuestra comunidad”.
Asimismo, calificaron como “un avasallamiento desmedido” las denuncias efectuadas por dirigentes sindicales y exigen a las autoridades gubernamentales que “suspendan en forma inmediata la persecuciones a los productores de la manera que se están haciendo”.
Además, solicitaron en forma “urgente” que se implemente una ley de fondo de desempleo citrícola o bien, que haya una rebaja del 50 % de los aportes, “teniendo en cuenta el trabajo intensivo de nuestro rubro”.
En otro de los puntos del petitorio, los productores piden que se elimine la “indemnización doble porque entendemos que este es un doble problema imposible de solventar”.
Por su parte, el Sindicato de la Fruta endureció su postura y cuestionó, sin ahorrar críticas, el petitorio de los productores al que calificó como un “panfleto”. En ese sentido, se reiteró la denuncia de la existencia de “empresas fraudulentas que venden el esfuerzo laborativo de trabajadores necesitados de trabajo, a empleadores inescrupulosos, que los emplean en total precarización de las condiciones laborales y eludiendo todas las obligaciones sociales y salariales dejando al trabajador totalmente desprotegido”.
Con la misma tónica, los dirigentes del gremio de obreros de la fruta consideraron que la “mejor manera de constatar si lo que denunciamos es cierto” es llevar a cabo las inspecciones en las quintas, tal cual está haciendo la autoridad de aplicación”.
“Nadie puede pretender que el productor desaparezca, pero tampoco ningún empleador puede pretender tener dependientes en condiciones irregulares. Los derechos y obligaciones nos caben a todos. No puede ser que se sientan perseguidos, quien quiere impedir que se pueda verificar si tiene personal dependiente y en qué condiciones los tiene, y mucho menos si hace pocos días acordaron con las autoridades de aplicación tener verificadores, seguramente para tener constancia de que las cosas se hagan en un marco de plena normalidad”, se indicó a modo de respuesta en un documento que lleva la firma de Carlos Gómez, secretario general del Sindicato de Obreros de la Fruta y de Alejandro Vicente Paiva, secretario gremial.
Tras el cruce de denuncias, la Dirección de Trabajo, acordó con la Federación del Citrus de Entre Ríos (Fecier) permitir la presencia de un veedor durante las inspecciones.
También se especificaron los pasos a seguir durante los procedimientos con personal propio, contratados a terceros o de terceros que se encontraran dentro del establecimiento intervenido.
Mientras que se ratificaron las “facultades amplias para el ingreso a los predios a los efectos de realizar las inspecciones pertinentes” que tienen las autoridades de Trabajo.
En el encuentro del que también participaron los intendentes de la ciudad de Chajarí y Villa del Rosario, se estableció además que el responsable de la parte empleadora intervenida podrá optar entre suspender las tareas en ejecución y concentrar al personal a ser verificado en un lugar del establecimiento; o bien realizar la verificación del personal sin la suspensión de tareas y en sus puestos de trabajo.
Fuente: El Diario
