La gestión anterior había decidido en mayo de 2007, a través de una reforma de la ordenanza de contabilidad, que la herramienta sería aplicada a partir del presupuesto 2008. Pero no se había fijado un porcentaje determinado para que se destine al presupuesto participativo. Sólo se había establecido que no debía ser una cifra menor al 10 % del presupuesto global.
En tanto, Bordet prometía en campaña su implementación. “Ya no alcanza con que los vecinos voten cada cuatro años, es necesario que la ciudadanía controle pero que también opine y decida, y para ello en nuestra gestión vamos a promover el presupuesto participativo”, decía en marzo de ese año. Sin embargo, en julio de 2008, el Concejo Deliberante, por unanimidad, suspendió la ejecución de la herramienta y establecía la conformación de una comisión para que lleve a cabo la tarea.
Transcurrieron los dos años y de la comisión no hubo noticias. No obstante, el presupuesto comenzó a aplicarse aunque lejos de las cifras que se mencionaban en un principio. El 10 % del presupuesto total 2011 rondaría los $ 24 millones debido a que el total se ubica en el orden de los $ 248 millones. No obstante, Bordet decidió poner a consideración de los vecinos de La Bianca $ 150.000 quizás porque se trata de un sólo barrio. Además cabe consignar que la ordenanza fue modificada el año pasado y la norma “no le fija al intendente un porcentaje determinado como sí lo hacía la anterior que era un 10 %”, dijo Kueider. “Pero no aclaraba si era el 10 % del total o descontados los recursos humanos”, detalló.
Además Kueider dijo que consideraron que aplicarlo en un año electoral en toda la ciudad no era conveniente. “No queremos mezclar las cosas, es un tema muy serio como para verse involucrado en una campaña electoral”, indicó.
El año pasado se realizó una prueba piloto en Villa Adela. Para este año decidieron comenzar por La Bianca. “Es un sector muy populoso y a su vez es una zona que no se caracteriza porque haya grandes movilizaciones de gente. Para nosotros es un desafío porque la idea es la participación ciudadana”, expresó.
Respecto de las inquietudes, Kueider señaló que aparecen las necesidades más urgentes como el arreglo de calles o de cloacas o la recuperación de la plaza. Posteriormente recién comienzan a aflorar los proyectos de mejoramiento del barrio a nivel cultural o deportivo. En tal sentido, el funcionario señaló que algunos propusieron construir un baño para el salón donde funcionan los talleres culturales, otros propusieron un invernadero o arreglar la escuela.
“Hay otros más ambiciosos como cordón cuneta o asfalto”, señaló. Obras de ese tipo son más caras y el monto asignado puede que no alcance o que se agote con rapidez. El secretario dijo que ese tipo de obras pueden gestionarse aparte. “Si Villa Adela quiere asfaltar diez cuadras y esas diez cuadras nos insumen $ 500.000, evidentemente esa gestión va a tener que hacerse a través del municipio con recursos de obra pública o gestionar ante la Nación cuando son montos elevadísimos”, explicó.
Los vecinos deben discutir sus proyectos, establecer un precio donde se incluyan los materiales y la mano de obra. El costo final es el valor del proyecto. Si la totalidad de las iniciativas no superan el tope asignado, se concretan todos. En caso contrario, los habitantes del barrio deben votar. “Cada uno promociona su proyecto en el barrio, se habilitan urnas, se hace la votación y se cuentan los votos. El más votado se hace en primer lugar y así sucesivamente hasta agotar el límite económico”, detalló el funcionario.
Por ahora la idea únicamente es concretarlo en la “Ciudad Satélite”. “Hay que hacerlo paso a paso”, indicó. El funcionario aseguró que las dudas que puedan albergar los vecinos se despejarán cuando empiecen a ver las obras realizadas. Hay ocho proyectos presentados y podrían elevarse a 12.
Kueider anticipó que la intención es replicar la experiencia en toda la ciudad en 2011. “Para eso se tendrán que asignar las partidas correspondientes cuando se presenten las partidas este año del presupuesto del año que viene”, expresó el funcionario. Queda flotando la incertidumbre acerca de la tardanza en la implementación del mecanismo tal como se lo está por llevando adelante.