La nota, presentada por Valdez, quien provocó una breve interrupción de la sesión, pregunta si “se realizó relevamiento de la población y de la real incidencia en un área densamente poblada (zona residencial…)?”. Otro párrafo deja un interrogante abierto: “¿se realizó un estudio de Impacto Ambiental, para la instalación del incinerador, cuales son los resultados y cuales los riesgos a los que están sometidos los habitantes de la zona…?”.
Otras líneas del escrito indagan sobre: planes de contingencia y monitoreo de la salida de material (humo negro) por la chimenea; almacenamiento de cenizas, ¿a cielo abierto o depósito cerrado?; plan para evitar olores desagradables; existencia o no de lavador de gases para evitar contaminación, etc.
El concejal Marcos Wdowiak (Todo por Concordia), al finalizar la sesión, expresó que la instalación del horno y las precauciones sobre su funcionamiento es un tema se viene tratando desde el 2004. El edil aseguró que actualmente no hay un pedido de autorización para instalar el horno. “Nunca hubo una presentación formal por parte del hospital”, admitió Wdowiak.
El concejal confirmó, en cambio, que hubo una reunión con la ministra de Salud, Graciela Degani, y el director del Hospital Masvernat, Bernardo Henquin. “Quedó el asunto pendiente hasta tanto recibamos otra información. En principio, hay una imposibilidad legal de que allí pueda funcionar un horno de residuos patológicos”, expresó.
La nota, en uno de sus párrafos, afirma taxativamente que “si la distancia mínima con cualquier zona residencial es de 2.000 mts. y de 400 mts. con la vivienda más próxima, por qué el municipio transgrede la ordenanza municipal y la pcia. de Entre Ríos trasngrede la ley provincial?”. Los concejales, en su totalidad, negaron que el Concejo haya flexibilizado la norma para que el horno del hospital pueda funcionar.
Por su parte, Wdowiak ratificó la vigencia de ambas normas. Pero señaló que Henquin, intentando justificar la ubicación del horno, argumentó en la reunión citada que el horno de residuos patológicos de la empresa Horizonte Gases funciona cerca de un asentamiento, en el campo “El Abasto”.
“Es cierto, la zona del Abasto fue el lugar elegido por el municipio para tratar todos sus residuos patológicos. Pero si hay un asentamiento, lo que está en infracción es el asentamiento. Habría que erradicarlo y llevarlos a sectores residenciales”, precisó.
“Una aberración”
Su compañero de bancada, el Dr. Roberto Chabrillón, aseguró que, en caso que el horno comience a funcionar: “primero es un delito porque hay una ley que lo prohibe”. Pero luego, al abordar las posibles consecuencias sobre la salud de los vecinos, fue contundente: “es una aberración”, expresó.
“Desde el punto de vista moral, un hospital que tiene que dar salud, contamine y enferme a toda una región, es absurdo que el gobierno viole la ley, un sinsentido. Tiene un cierto grado de perversión”, indicó el ex-director del hospital “Ramón Carrillo”.
Para el galeno, los vecinos corren riesgos de contraer “todo tipo de contaminación que se pueda adquirir vía cutánea o por respirar gases tóxicos”.
Wdowiak puntualizó que el horno de “Horizonte Gases” tiene autorización nacional, provincial y municipal. “Incluso, la otra vez se inauguró una cámara lavadora de gases donde estaba todo el personal técnico de la Nación controlando periódicamente el funcionamiento de este horno, que no tuvo quejas en cinco años de funcionamiento”.
Por último, Wdowiak explicó los pasos que los concejales deberán seguir para monitorear de cerca el tema. “Hay que ver primero que es lo que determina el departamento Ejecutivo, que es a quien corresponde otorgar las habilitaciones, y en caso que haya un impedimento legal, que se tenga que aprobar por otro camino, seguramente el pedido vendrá al Concejo Deliberante. De todos modos, no se puede estar en contra de la ley”.
