En el “Super Vea” no había carteles identificatorios en góndolas que identifique a la gran mayoría de los productos esenciales de la canasta básica. Las únicas excepciones fueron la leche La Serenísima en sachet a $ 7,60 y el arroz Gallo de 500 grs. a $ 13. El resto no había forma de distinguirlo de los productos que no están incluidos en la lista de precios.
Por ejemplo, en la góndola de los aceites aunque había tres marcas (“Cada Día”, “Ideal” y “Cañuelas”) a los precios acordados, no había ningún rotulo que los identifique como productos pertenecientes al programa. Lo mismo sucede con la harina, había en góndola “Blancaflor” y “Favorita” pero sin letreros especiales.
En primer lugar, Hourcade remarcó que lo que hay que tener en cuenta es que, al ingreso del supermercado, debe haber un cartel con todos los productos ofrecidos. “Eso es lo principal”, señaló. Más adelante, indicó que los precios deben estar individualizados. “En las góndolas deben estar diferenciados de los que tienen los precios comunes”, expresó.
Pero además en el Vea se observó faltante de algunos productos como la yerba mate “Amanda” de 1 kg. a $ 28.35, tal como fue acordado, sino que el mismo envase de esa marca costaba $ 31. Tampoco se encontró café molido “La Morenita” de 250 grs. a $ 14,80; sólo había azúcar de 1 kg. “Ledesma” a precios cuidados $ 7,80 porque $ 9.65 costaba el mismo paquete de “Chango” que debería vale $ 7,59; de las cuatro variedades de fideos secos sólo había tallarines “Favorita” a $ 7 y la lata de atún “La Campagnola” de 170 grs. costaba $ 26 (debería valer $ 21) y el “Gomez da Costa”, también de 170 grs., $ 14 (debería costar $ 10).
También era llamativo el lugar donde se ubican productos incluidos en el acuerdo como los galletitas saladas “Express” a $ 4,40, encimadas hacia adentro en el último estante inferior de la góndola, casi como escondidas, y la cerveza de 1 lt “Quilmes Bajo cero” a $ 10, una hilera angosta respecto del resto, sin precio alguno.
Consultado al respecto, Hourcade indicó que los abogados de las empresas alegan distintas excusas ante la Dirección de Defensa del Consumidor de la Provincia. “Que la mercadería está transitando hacia Concordia, que se terminó, que hay que cambiarla. Lo mismo con los avisos: que se corren, que se pierden, que las gente los saca. Es un sinnúmero de excusas”, indicó. Luego de recibir el descargo, la repartición debe determinar si corresponde o no la sanción. O elevar el expediente a la secretaria de Comercio Interior de la Nación.
En el Carrefour del centro, no faltaban los carteles pero en muchas góndolas no había productos disponibles. Por ejemplo, en la góndola de los aceites había una sola botella de Cañuelas de 900 cc a y el resto estaba vacío, además faltaban las tres marcas promocionadas en el acuerdo de azúcar y solo había paquetes de 1 kg. “Santa Celia”, la yerba mate de 1 kg. “Amanda” costaba $ 34 y no $ 28,35, fideos secos sólo tallarines “Favorita” a $ 7 y muy pocos tipo coditos de “Canale”. Respecto de las carnes, había una sola bandeja de tapa de asado a precios cuidados: $ 44,30 el kilo. Pocas galletitas “Mediatarde” a $ 4,40, no había café molido “La Morenita” y respecto de la cerveza dos envases de 1 lt. Bieckert a $ 10.
En tanto, Hourcade señaló que no hay denuncias concretas de consumidores respecto de lo que se observa en los supermercados. Asimismo, indicó que en marzo y abril vinieron inspectores de Paraná a recorrer los comercios pero en lo que va de mayo no se presentaron.
Cuando se constate la ausencia de mercadería que figura en los listados o de carteles identificatorios, el responsable de Defensa del Consumidor dijo que la gente debe llamar por teléfono a la oficina local ubicada en calle San Juan. Una vez efectuado el trámite, se labran las actas de constatación a modo de colaboración y se envían a Paraná porque aún no cuentan con la facultad de sancionar por cuenta propia.
Los supermercados locales que adhirieron al acuerdo de precios lo hicieron en forma voluntaria. Probablemente por eso no hay productos esenciales como la leche sachet o la yerba. En el supermercado Modelo Express el sachet de leche entera La Serenisima cuesta casi $ 11 cuando el mismo vale poco más de $ 7 en las cadenas que respetan el acuerdo. Y el paquete de yerba de 500 grs. vale $ 20 contra los $ 17 del acuerdo o $ 39 el kilo en contraste de los $ 28 que vale el mismo envase aunque, en este último caso, tampoco se encuentra en los comercios más grandes.
De todas formas, cuando se constata la ausencia de algún producto incluido en el listado que debe estar visible a la entrada (esta mañana no había ninguno en la sucursal del Modelo de calle Urquiza), la infracción que corresponde se denomina “incumplimiento de oferta”. Es la misma que cabe en el caso de la promoción de productos a precios determinados durante un lapso estipulado en un medio de comunicación masivo que no son respetadas al momento de comprar y pasar por caja. Hourcade señaló que, a diferencia de los 12 o 13 de los supermercados locales que adhirieron en 2013, este año sólo tres se inscribieron y hasta ahora ningún cliente hizo denuncia alguna por faltante de productos.
Autonomía y más gente en la calle
Hasta el momento, Defensa del Consumidor cuenta con una sola persona que debe recorrer todos los comercios adheridos al programa además de otras tareas inherentes a esa repartición. “Tenemos programado que para junio tendremos en la calle muchos colaboradores que van a ayudar al labrado de actas. La idea es sacar a seis, siete u ocho personas a controlar todas estas cuestiones”, adelantó Hourcade.
Hasta ahora, las actas son enviadas a Paraná y los representantes legales de las empresas viajan hasta esa ciudad para hacer los descargos. Esa situación podría cambiar a partir del mes que viene si cambia la ordenanza que regula el funcionamiento del Juzgado de Faltas. El código de faltas vigente data de 1973 y quedó relegado en varios aspectos. Aunque sí contempla la sanción por incumplimiento de precios. Por lo tanto, sólo se requiere la decisión política para aplicarlo En consecuencia, de aplicar ese artículo, las actas serían elevadas al Juzgado de Faltas para su juzgamiento y sanción.
Antes que eso, Defensa del Consumidor tiene previsto realizar un relevamiento de la exhibición de precios en general en toda la ciudad debido a la ley que obliga a la presencia de carteles en las vidrieras de negocios de cualquier tipo como ropa, electrodomésticos. Tanto los precios de contado como los financiados y la cantidad de cuotas. A quienes no cumplen, luego de la advertencia, se les labrará actas de infracción. “La diferencia es que en vez de ir a Paraná, se resolvería en el juzgado de Faltas”, acotó el responsable.