La otra novedad es que el inicio anunciado con una resolución judicial para el 6 de noviembre sufrirá una segura postergación. El juzgado de Sentencia encargado de definir la fecha correrá el arranque, manejando como alternativas el 13 o el 21 del mismo mes, para terminar de aprontar el cronograma de las audiencias, donde serán juzgadas 26 personas.
El Centro de Justicia Penal se levanta en la manzana delimitada por Sarmiento, Rueda, Mitre y Virasoro.
Prioridades
El viernes pasado las máximas autoridades judiciales recibieron al ministro de Seguridad de la provincia, Maximiliano Pullaro, y al secretario de Asuntos Penitenciarios, Pablo Cococcioni, para considerar dos prioridades a garantizar durante el tiempo que dure el juicio: la custodia en los traslados de los nueve detenidos que llegan privados de libertad y la seguridad del edificio durante las audiencias.
Para los traslados desde las unidades carcelarias a la sede del juicio se prevé un despliegue de seguridad inédito, con un operativo de fuerzas conjuntas en el que participará el Grupo Operativo Especial Penitenciario (Goep), la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) y Gendarmería. Además se destinarán efectivos de la policía provincial para las tareas de acordonamiento externo del edificio.
A fin de reforzar la seguridad se prevé que los nueve detenidos permanezcan de lunes a viernes en la alcaidía del nuevo centro de Justicia Penal, un subsuelo semienterrado con celdas con capacidad para alojar a treinta personas. La propuesta barajada en la reunión del viernes es que ese lugar, que es para el resguardo transitorio de detenidos durante poco tiempo mientras esperan audiencias, pueda acondicionarse como pabellón especial. Terminada la última audiencia los días viernes, los detenidos serán transferidos durante el fin de semana a la Unidad Penitenciaria 16, ubicada en Pérez.
Nueve
Los nueve acusados que llegan al juicio detenidos son Ariel Máximo "Guille" Cantero, Ramón Ezequiel "Monchi Cantero" Machuca, Máximo Ariel "Viejo" Cantero, Mariano Salomón, Emanuel Chamorro, Leandro Vilches, Walter Jure, Juan Delmastro y Andrés Fernández. Asimismo, Guille, Chamorro, Vilches y Jure cumplen también prisión preventiva por causas de narcotráfico dispuestas por la Justicia Federal.
Las jornadas de juicio se desarrollarán mañana y tarde en dos grandes salas —las de máxima superficie cubierta— situadas en los extremos del segundo piso. Allí estará el tribunal de juicio, los dos fiscales con su equipo de colaboradores y los 26 imputados con un cuerpo de once abogados defensores.
En salones separados, en el primer piso, seguirán las alternativas los familiares de los imputados, por un lado, y la prensa y público general, en otro. La organización del edificio garantiza que los allegados a los acusados, el público general y los funcionarios judiciales circulen sin cruzarse.
Ayer el edificio lucía ayer pendiente de algunas terminaciones pero no en las salas de audiencias, cubiertas de polvo pero con el mobiliario y las pantallas de TV ya instalados. En el predio no hay más actividad que la de operarios y técnicos que trabajan en las conclusiones. Pese a que el lugar fue inaugurado en julio por las autoridades del gobierno y Justicia provincial no hay ninguna dependencia funcionando.
Formalidades
En la reunión del viernes pasado, además de las autoridades de Seguridad, participaron el presidente de la Corte Suprema, Daniel Erbetta, y los titulares del Colegio de Jueces de Rosario, Luis María Caterina y Carlos Carbone.
Para formalizar estos acuerdos sólo resta la decisión del juez de Sentencia Julio Kesuani como última intervención. El Tribunal de juicio estará integrado por Ismael Manfrim (presidente), Marisol Usandizaga y María Isabel Más Varela.
Fuentes del Ministerio de Seguridad señalaron a este diario su preferencia de que el juicio se celebre en el nuevo edificio. "Todo los esquemas de seguridad están a disposición para el día de inicio donde sea, pero entendemos que el nuevo edificio es el que mejor se adapta", indicó un portavoz de esa cartera.
Las ventajas pasan por la mejor circulación desde los centros de detención hasta el edificio escogido, evitando en las horas pico de entrada y salida en la más congestionada área de avenida Pellegrini y Balcarce, donde se levanta el Palacio de Justicia.