La normativa fue aprobada por mayoría hace pocos días y fue motivada por una petición que los comerciantes realizaran al Concejo Deliberante local. Los dueños de boliches bailables, en realidad, habían solicitado extender en dos horas el horario de cierre en Navidad, Año Nuevo, carnavales y aniversarios de fundación de sus locales comerciales. Esto no fue una novedad, ya que con esa carta solamente insistieron en un pedido que tiene más de un año, momento en que se impuso un tope en el horario de apertura de sus locales. Pero los ediles consideraron que había que ceder, pero no en esas pretensiones, por lo que solamente otorgaron un 50 por ciento del petitorio.
En la oportunidad, los radicales aprobaron la moción, en tanto el bloque del PJ votó dividido, sumando tres votos a favor y dos en contra.
La normativa no satisfizo al intendente Juan García, quien vetó la Ordenanza en su totalidad. Eso motivó que la misma vuelva al Concejo y, esta noche, será tratada.
Para rechazar el veto del Ejecutivo los ediles necesitarán sumar las dos terceras partes de los votos. Si nos atenemos a la anterior votación, el número de votos se lograría, ya que los cuatro votos radicales más los tres del PJ harían la mayoría especial… pero en política nunca está todo dicho. No son pocas las versiones que indican que al menos un edil del PJ, ante la decisión del intendente, cambiaría su postura y lo que ayer fue sí ahora podría ser no. Así lo admitió el propio titular del bloque de ediles oficialistas, Horacio Garay, quien además de asegurar que él se mantendría en su postura, consideró posible que alguno de sus pares no lo hagan.
Como decíamos, en política muchas cosas son posibles, por lo que no llamaría demasiado la atención que alguien, en pocos días, cambie de opinión o diga que no quiso decir lo que dijo o, en términos legislativos, no quiso votar lo que votó.