La joven cuestionada es “la hija de la secretaria”, indicó Torrea. “Estamos reunidos acá con las compañeras porque ha salido una vacante. Las vacantes se tienen que dar al suplente transitorio con más antigüedad pero la directora no respeta los decretos que hay de 2005. Hay una comisión de suplentes acá en el hospital que es integrada por los dos gremios”, señaló además. La delegada pidió que la joven propuesta por la Dirección comience con suplencias transitorias.
Asimismo, Torrea dijo que desde la secretaria de Salud le indicaron que la directora del nosocomio, Graciela Chiappa, alegó que no había personal idóneo en el listado para cubrir la vacante. Y lo negó. “Tenemos compañeros con la secundaria y técnico en farmacia. Esto es una discriminación a los compañeros. El gobernador no debe estar en conocimiento”, manifestó.
Al mismo tiempo, indicó que los trabajadores le pidieron que respalden un posible plan de acción. “Ellos quieren instalar una carpa en la vereda del hospital o que baje algún funcionario de la secretaria de Salud. Hay muchos compañeros que se sienten mal porque hay padres de familias que están haciendo suplencias transitorias desde hace cuatro o cinco años y esta chica es soltera. Me parece que habría que darle una oportunidad a esos padres de familias”, argumentó.
Noemí Bonomi, delegada de UPN, dijo que desconocía la capacidad intelectual de la postulante ya que “nunca trabajó”. “Y la ley me parece que cuando es igualitaria no es rigurosa. Lo que pasa es que nos han cerrado el padrón de suplentes y entra una por la ventana. Los demás tienen derechos”, indicó. “Una vacante no es igual a una suplencia transitoria. Acá hay personas que hacen una suplencia por año y por eso nos parece discriminatorio y muy antojadizo colocar una persona nueva”, añadió.
Una trabajadora, María Tenis, dijo que le faltaban ocho años para jubilarse. “No me puedo ir hasta no saber que hacer con mi hija. Hace tres años que está trabajando y hace una suplencia cada año de un mes, 20 días”, explicó. “Hay unas cuantas que tenemos el mismo problema y no puede ser. Acá adentro hay familias enteras; yo tengo tres hijos desocupados pero por lo menos quiero una que entre”, acotó.
Otra empleada del Heras, Liliana Ferreira, sostuvo que tiene 23 años de servicio pero no sabe como hacer para que su hijo, con estudios secundarios, pueda ingresar a realizar una suplencia. “No pudo porque siempre está cerrado el padrón”, dijo Ferreira y explicó que hace cinco años se encuentra en esa situación.
Durante la entrevista, un desconocido que estaba presenciando la asamblea sentado en el pasillo se exaltó y comenzó a vociferar en voz alta en contra de la política de UPCN, haciendo caso omiso al pedido de calma. “Esto es lo que nos pasa, nos atropellan de esta manera. Fue agredida en dos oportunidades. Estamos presionadas, no puede ser que cualquiera nos insulte, nos amenace. No sabemos si salimos vamos a llegar bien a nuestras casas. Es un ‘mandado’”, dijo Bonomi.
