Con la crisis global en el horizonte, la Nación instrumentó el Programa de Recuperación Productiva que, esquemáticamente, propone el pago de un subsidio por trabajador a cambio del compromiso de que no haya despidos injustificados. En Entre Ríos, ya son 25 las empresas beneficiadas y unos 400 trabajadores tienen un salvoconducto asegurado, al menos por tres meses que pueden hacerse seis.
Este programa está dirigido exclusivamente a empleados que prestan su labor en sectores privados en declinación y áreas geográficas en crisis. Se aplica desde el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social de la Nación y prescribe una serie de mecanismos para evitar despidos sin causa justificada. Se prevé aplicarlo mientras dure la Emergencia Ocupacional que declaró el Poder Ejecutivo Nacional.
En Entre Ríos, el PRP asiste a frigoríficos, aserraderos, cerealeras, empresas citrícolas, portuarias, curtiembres y fábricas de aberturas con una ayuda económica de 600 pesos por trabajador durante tres meses, con opción de ampliarla por otros tres meses más. Este apoyo cobra mayor magnitud cuando se advierte que la deducción de los aportes patronales que debe pagar el empresario se realiza sobre el neto que paga al trabajador, sin incluir el beneficio que aporta Nación.
Los trabajadores entrerrianos cubiertos por el programa son alrededor de 415 y las empresas, en su mayoría, están instaladas en Concepción del Uruguay, Colonia Nueva, Ramírez, San Justo, Oro Verde, Federación, Gualeguaychú, Paraná y Concordia.
Para acceder a los beneficios del programa la empresa debe exhibir documentación que acredite que está bien constituida, funcionando y con el personal debidamente inscripto. Además se le solicitan los balances y, especialmente, un informe actualizado, avalado por un contador donde la empresa pueda acreditar fehacientemente la situación por la que está atravesando.
El director de Trabajo de la provincia, Oscar Balla, explicó que “cuando salimos de inspección nos encontramos con empresas que tienen dificultades económicas y tomamos los recaudos necesarios para salir en su auxilio porque lo que privilegiamos es preservar el nivel de empleo”. Y añadió: “Tratamos de que no se generen suspensiones ni despidos, por lo que acompañamos a estas empresas para que desde la Nación se les de una ayuda como se les ha dado a 25 empresas por el PRP”.
“El ministro de Gobierno, Adán Bahl, ha mantenido reiterados contactos en el Ministerio de Trabajo de la Nación para plantear la situación particular de algunas empresas”, comentó Balla, al señalar que “luego del trámite correspondiente realizado ante la Dirección de Trabajo, el ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, accedió a brindar la asistencia a través del PRP asistiendo a aquellas empresas que estaban en condiciones de ser beneficiadas por dicho programa”, y destacar que “todos los trámites que ha realizado el gobierno provincial ante la Nación tuvieron buen eco y recepción”.
Además de las empresas que recibieron la asistencia del PRP mediante las gestiones realizadas ante Nación, el gobierno provincial intervino en defensa de los puestos de trabajo de trabajadores del puerto de Concepción del Uruguay, de cosechadores del arándano del departamento Concordia, brindó ayuda a pescadores y mantiene diálogo permanente con las principales centrales gremiales.
Las objeciones al dragado del río Uruguay en La Histórica retrasaron el nivel de actividad del puerto, que requiere de un mayor calado para que ingresen barcos y buques de mayor envergadura. Así, alrededor de 213 trabajadores portuarios vieron disminuir la actividad y los ingresos. Y por ello se los asiste con una ayuda por tres meses de 225 pesos.
También el gobierno provincial tomó parte en la situación que vivieron los trabajadores del sector arandanero. Por expreso pedido del gobernador Urribarri, se gestionó ante el ministro de Trabajo y Seguridad Social de la Nación, Carlos Tomada, un importe mensual de 225 pesos para ayudar a más de 8.000 jornaleros que vieron menguados sus ingresos como consecuencia de la grave sequía que afectó la cosecha de ese fruto.
Pescadores artesanales
Otro sector que se encuentra en situación de vulnerabilidad es el de los pescadores artesanales. Para estos trabajadores que no responden a los cánones tradicionales del mercado laboral, pero que ven peligrar su sustento como consecuencia de la prolongación de la veda necesaria para recuperar el recurso pesquero del río Paraná, el Estado provincial gestionó ante Nación y obtuvo la prórroga de una ayuda económica que alivia la situación de más de 2.000 pescadores.
En forma paralela a estas acciones destinadas a trabajadores del arándano, pescadores y portuarios, el gobierno provincial fomentó el diálogo con la dirigencia gremial: “El ministro Bahl encabezó encuentros con las regionales entrerrianas de la Confederación General del Trabajo (CGT) y de las 62 Organizaciones Peronistas de Entre Ríos. Recibimos a los dirigentes con la idea de profundizar el diagnóstico de lo que ocurre en cada localidad, particularmente donde hay funcionando delegaciones de la Dirección de Trabajo”, comentó Balla. Y concluyó: “Siempre apostando al dialogo entre los trabajadores y sobre todo con la firme convicción de mantener el empleo”.
Fuente: El Diario