Mega, es oriundo de Concordia, y este año comenzó a cursar en la Escuela de Comercio de Chajari, hasta el mes de mayo, cuando el accidente en esa ciudad lo dejó imposibilitado de seguir asistiendo a clases. Una vez recuperado, volvió a clases días atrás porque –de acuerdo a directivos del establecimiento- “así se lo permitía el reglamento, no tiene una inasistencia que sea superior a lo permitido para volver al aula”.
Pero alumnos amigos de los chicos fallecidos -Ramiro Bravo (18) y Cristian Panozzo Zénere (17),-, que van a esa escuela, padres de esos alumnos o de las victimas y algunos docentes manifestaron su preocupación por el regreso del joven concordiense al aula, porque expresan que “los chicos lo tienen a él (Mega) como el culpable del accidente, como el que ocasionó la muerte de los otros dos chicos”. Y que eso “podía ocasionar serios roces”.
Cerca del mediodía de hoy, Damiana Giacomelli, directora del establecimiento, le confirmaba a DIARIO JUNIO que había hablado con el muchacho y este le manifestó que “abandonaría la escuela por toda la presión que tiene encima”. “Al chico lo tratan poco menos de asesino”, expresó la docente. “Es muy lamentable que pase esto en una escuela publica, donde todos tiene los mismos derechos a asistir a clases”, agregó.