Vale recordar que durante la gestión de Baldezari en los paradores del complejo Ayuí, fue asaltado en 7 oportunidades y la ultima, en enero del 2018, estimó un reinversión de 30 mil pesos para reacondicionar el lugar. En esa oportunidad el joven empresario manifestó sentirse “sólo, desanimado y sin el apoyo del organismo provincial” para cuidar de uno de los lugares con mayor atractivo turístico de la ciudad en la temporada estival. “Necesito cada tanto levantar el teléfono por un problema y que alguien me responda”, solicitó aquella vez en un claro pedido de ayuda dirigido a los responsables de la repartición provincial.
Siete meses después de aquella nota y en vísperas del verano 2019, la CODESAL obtuvo la autorización de la ministra de Gobierno y Justicia, Rosario Romero, para la licitación y puesta en valor de los servicios de Cantinas en el predio por un periodo que abarca desde el 1 de octubre del 2018 hasta el 30 de abril de 2019 y con una opción de prórroga a favor de CODESAL. “Pobre gente la que se meta ahí”, advirtió Baldezari. “La verdad es que yo no sé con qué criterio mandan a licitar, si cuando yo fui a retirar las cosas de la cantina estaba todo destruido”, afirmó. “No se…capaz este año se pongan las pilas. Yo fui al lago con un objetivo que duró 4 años, pero terminé por bajar los brazos y aceptar que sin el apoyo de la parte pública es imposible avanzar”, concluyó.
