Plan de lucha y paro

Palazzo condenó ayer “la artera maniobra de las entidades financieras en el marco de las negociaciones paritarias, lo que negó los avances producidos en conversaciones previas con funcionarios laborales y las propias cámaras” y advirtió “la actitud provocativa” que mostraron los paritarios patronales durante la última reunión realizada en el Ministerio de Trabajo. Pero además, Palazzo denunció que la responsabilidad del fracaso de la negociación salarial recae sobre el presidente del Banco Central, Adolfo Sturzenegger, a quien consideran un émulo de José Alfredo Martínez de Hoz. Según el dirigente sindical la presión del funcionario llevó a que “los empresarios retrocedieron hacia una irrisoria propuesta de aumento escalonado y no acumulativo de 7 por ciento a partir de enero y de dos cuotas del 4 por ciento desde julio y octubre, respectivamente, y procuraron tomar como base el haber de diciembre y reducir en un 50 por ciento la compensación del Día del Bancario. También ratificaron la negativa a abonar la compensación anual de enero”, afirmó Palazzo a través de un documento que firmó junto a Eduardo Berrozpe.

Por otra parte, el secretario general de la Bancaria señaló con particular interés otra actitud de las patronales que “se niegan a cumplir el fallo judicial que ordenó aplicar de forma mensual la cláusula gatillo según la evolución del Índice de Precios al Consumidor y a partir del principio de ultra actividad consagrado por la ley hasta que se suscriba un nuevo convenio paritario”, indicó el documento. La cláusula debía pagarse a partir del primer día de enero y a pesar de la existencia de un fallo que lo ordenaba, las patronales continúan sin acatarlo por contar con la venia del ministerio que conduce Jorge Triaca.

Incluso entre los dirigentes de la Bancaria existe la sospecha que la decisión de la cartera laboral de convocar a una nueva reunión paritaria recién para el 28 de marzo, esconde una posible provocación que pretende que tanto bancos como el gobierno nacional “no desean que los trabajadores transcurran la Semana Santa en paz”. El documento del sindicato bancario destaca además que la oferta salarial no se compadece con la evolución de la inflación de 2017 y mucho menos con la evolución del índice de precios previsto para este año y mucho menos “con las fabulosas rentas que obtienen las entidades todos los años, en especial en el negocio fácil de prestar al Estado o cobrar tasas usurarias a familias y empresas. Se trata de dañar a los trabajadores”, sostuvo la conducción de la Asociación Bancaria.

Entradas relacionadas