Desde ayer, en el momento en que se conoció el decreto 652/17 firmado el 14 de agosto, la UF se declaró en estado de alerta. “Que casualidad luego de las PASO”, acotó Pezzarini respecto de la fecha en que fue firmado. Luego explicó que, de acuerdo a la decisión que el ministerio de Transporte adopte, se puede comenzar con un plan de acción que puede incluir movilizaciones u otras medidas de protesta. “Cualquier actitud que tomen que no sea congruente con la UF o con los trabajadores se tomará la actitud que sea necesaria”, señaló.
El gremialista indicó que desde marzo de 2016 comenzaron a ventilarse los planes que desde el Ejecutivo nacional albergan respecto del ramal Urquiza. Primero comenzaron con los retiros voluntarios. “Son despidos encubiertos”, dijo.
Luego se mencionó la posibilidad de cerrar por tres años el ramal Urquiza. Por experiencia, Pezzarini indicó que cuando se cierra una conexión ferroviaria luego es muy difícil reabrirla. Y el mejor ejemplo es la vía que corre entre Concordia-Federal-Paraná: cerrado desde la década del 90 y nunca reabierto, hoy es una vía muerta.
Junto con los otros gremios como Apdefa y La Fraternidad, la UF comenzó a movilizarse para evitar el cierre. Pezzarini destacó que lograron que retrocedan pero volvieron con los retiros voluntarios. “Tampoco les dio resultados”, dijo.
En ese momento fue cuando comenzó a trascender la posibilidad de mudar a Monte Caseros (Corrientes) de los talleres de Concordia. “Los denunciamos y volvieron para atrás”, dijo. Por ende, surge la posibilidad de llevar los talleres a Estación Yuquerí. “Lo que quieren hacer es un estilo by pass. El ministro de Infraestructura lo tiró”, precisó. De esa forma, se empalma La Criolla con Estación Yuquerí dejando de lado a Concordia.
En los talleres de Concordia hay 90 empleados. Si se lleva a cabo el by pass, Pezzarini sostuvo que de entrada se pierden 20 puestos de trabajo como los guardabarreras. A eso hay que sumarles 15 empleados que se encargan de las maniobras en la estación. Pero, en líneas generales, el sindicalista acotó que están en riesgo las 90 fuentes laborales pertenecientes a la UF.
En Estación Yuquerí funcionaría una estación de servicios, una estructura pensada para reparaciones livianas de locomotoras además de cargar combustible, agua y arena, maniobras que requieren mucho menos empleados que los talleres de reparación. Solamente se requieren dos personas para encargarse de la locomotora y otras dos para una reparación liviana más un operador. El gremialista explicó que en total sólo se requieren 20 personas distribuidas en cuatro turnos.
Además dijo que para conectar La Criolla con Estación Yuquerí se requiere una inversión millonaria mientras que para dejar los talleres de Concordia en óptimas condiciones se requieren $ 1.500.000 o $ 2.000.000. El secretario general destacó que Concordia tiene fosas para 16 locomotoras, una prueba potencia y un lavadero además de infraestructura para realizar el control de los trenes. “Creo que es desperdiciar toda la infraestructura que tenemos en Concordia por un capricho de los gobernantes”, indicó.
Por otra parte, el ramal no está inactivo. Pezzarini indicó que corren dos trenes cargados con piedra por día. Y otro que carga contenedores. Además están trabajando con locomotoras que fueron recuperadas en los talleres de Concordia. De hecho hay seis locomotoras de cabecera en condiciones de operar más otras de maniobras. Otras dos más están saliendo de los talleres de Córdoba y llegarían el mes próximo.
Asimismo llegaron locomotoras de China al país y una decena debían ser destinadas al ferrocarril Urquiza. “De esas no hemos recibido ninguna”, acotó el gremialista. No obstante, si fueron enviados vagones nuevos que son utilizados para acarrear piedras mientras que en la Estación Central hay otros con tolvas para transportar grano.
No obstante, Pezzarini dijo que no creía que prospere el cierre de los ramales dado que el tema se va a nacionalizar. Por otra parte, indicó que la Cámara de Diputados de la Nación ya comenzó a tomar acciones sobre el decreto.
Por último, el gremialista recordó que en la pasada década, cuando corrían riesgos las fuentes laborales de 240 personas, cortaron la vía por varios días a la altura del Hospital Heras. “Tomamos la vía de una. Y si tenemos que volver a hacerlo, lo vamos volver a hacer que no quepa ninguna duda. El dirigente va a la cabeza o van con la cabeza del dirigente. Ya tomamos la decisión. Si tenemos que ir, vamos a ir a las vías y a mí me sacarán muerto de la vía. De otra forma no me van a sacar”, sostuvo.
