En una nota concedida al periodista Luis Ceriotto de Clarín, Sábato dijo “ahora comenzamos a exportar. Pero hasta el momento todo consistió en poner y poner dinero. Llevamos invertidos en Entre Ríos más de seis millones de dólares a lo largo de cinco años». Sábato, además es propietario de viñedos en Mendoza.
Hijo de un psiquiatra argentino, Sábato nació en EEUU y se crió allí mientras su padre hacía la residencia médica. A mediados de los años 70 Sábato se recibió de médico en la UBA, pero tras unos años como investigador en el Hospital de Clínicas regresó a su país natal, donde ejerció como neurólogo durante 20 años. Pero siguió en contacto con la Argentina, donde decidió hacer negocios: destinó los profusos ahorros que le proporcionó su profesión a la compra de campos, con la idea de aprovechar los nichos de alto valor agregado, como las berries y los vinos.
Como se sabe, esta firma Blueberries (arándanos, en inglés) adquirió el predio en un remate judicial de la ex Pindapoy, la ex empresa de Próspero Bobino. Se trata de 300 hectáreas plantadas centímetro a centímetro por lomadas tapizadas en plástico negro, por el que asoman plantines de arándanos. «Es un tipo de producción que exige mucho terreno: en 300 hectáreas, se aprovechan apenas 110», graficó Sábato, quien no reconoce parentesco con la familia del escritor.
Dentro del establecimiento, los empleados de Blueberries hacen la selección y empaque, y también rocían con bromuro las frutas, por exigencia del mercado de Estados Unidos, ya que la Argentina no está libre de la denominada «mosca de la fruta».
La planta de empaque, que costó US$ 500.000, ahora está siendo ampliada para tomar producción de otros establecimientos. «Por mis contactos, tengo buena llegada a los clientes de EE.UU. Y quiero que Blueberries comercialice arándanos propios y de otros productores. Es también una manera de asegurar la calidad del producto, ya que una mala partida proveniente de la Argentina lastima a todos por igual», agregó Sábato.
Blueberries es la principal exportadora argentina de arándanos: entre enero y noviembre, despachó 464.000 kilos. Si bien se recorta nítidamente con respecto a las demás, en los primeros 11 meses del año los despa chos totales de arándanos, sólo a EE.UU., superaron las 2.000 toneladas, con un valor total que rondaría los US$ 40 millones.