El encuentro es considerado clave en Uruguay ya que muchos piensan que, por no haber consultado a la oposición, fracasaron las negociaciones con la Argentina. Desde que se conoció el fallo de La Haya, Tabaré ha evitado gestos triunfalistas. En cambio, el presidente Néstor Kirchner sugirió que los organismos de crédito dejen de financiar a las plantas.
Para la oposición, la postura es un tanto incomprensible. «Para los códigos que manejamos en Uruguay, me es muy difícil entender la lógica del presidente Kirchner», le dijo a Clarín Pablo Mieres. «Con sus declaraciones plantea una estrategia de poca prudencia y fuerte confrontación, que no me parece la adecuada para este momento de relacionamiento entre ambas partes», agregó.
El ex presidente Jorge Batlle tampoco convalidó las palabras del mandatario argentino. «Las palabras de Kirchner no fueron las más adecuadas, me parece que no fueron el mejor introito para el inicio de una conversación, la que Uruguay sin duda debe empezar a gestionar».
Desde el gobierno uruguayo admiten que la idea es seguir dejándose guiar por la cautela. Sin bien se tiene claro que Uruguay debe tomar la iniciativa del diálogo, antes esperará «alguna señal más aperturista por parte del gobierno argentino».
También participará del cónclave Jorge Brovetto, actual ministro de Educación y Cultura, en su calidad de presidente del Frente Amplio.
