
En consecuencia, la propuesta recibirá mayor adhesión de parte de los docentes ubicados en provincias norteñas como Chaco, Formosa, Salta, Misiones, Corrientes y Buenos Aires, donde los maestros perciben entre $ 19.000 y $ 20.000. “Claramente los $ 23.000 le generan un oxígeno”, manifestó.
Por otra parte, Pagani dijo que la suma fija que ofrece el gobierno, consistente en $ 4848 dividido en cuatro cuotas, achata el escalafón docente y no va a los jubilados. “No va a los aportes a la Caja de Jubilación ni a la obra social”, dijo a Radio Ciudadana (FM 89.7).
En tanto, desde la Nacion destacaron que hubo acuerdo y comenzarán las clases el 2 de marzo. La propuesta consiste en elevar el salario mínimo docente a $ 23.000 en marzo y a $ 25.000 en julio y abonar una suma fija de $ 4.840 en cuatro cuotas, será evaluada mañana en el Congreso Nacional en la sede de Ctera en Capital Federal.
Respecto de la paritaria nacional, Pagani dijo que se debe contextualizar la misma en comparación con los últimos cuatro años. Y un solo dato basta para revelar el grado de compromiso del gobierno macrista con la educación pública: la inversión total del PBI descendió del 6,5 % al 4,8 %. “Algún desprevenido puede decir que del 6,5 % al 4,8 % no es tanto, pero del PBI es muchísima plata”, indicó. “Las palabras sobran sobre el grado de desinversión que hubo”, dijo. En consecuencia, se paralizó el Fonid (Fondo Nacional del Incentivo Docente) lo que generó el congelamiento de la desigualdad salarial entre provincias.
Por ende, las confederaciones de gremios docentes, como Ctera a nivel nacional, en conjunto con los gremios de base, como Agmer en Entre Ríos, salieron a la calle a reivindicar la paritaria docente y protagonizaron convocatorias multitudinarias como la Marcha Federal.