Fue en horas de la tarde de ayer que las cocineras del Centro Zubizarreta informaron que a las autoridades provinciales que algo no andaba bien. “Tratamos de hacer pan casero y nos salió apelmazado. Algo parecido nos sucedió con las tortas negras; no se podían comer de lo duras que estaban”, se indicó. El enigma se disolvió cuando observaron la fecha de vencimiento de los paquetes de harina: 7 de mayo.
Los 500 kilogramos de harina fueron entregados por la propia esposa del gobernador Jorge Busti, Cristina Cremer, que no dispone de partidas de tal tipo en su área, y que habían sido autorizados por la ministro Graciela Degani, con quien siempre la unió una estrecha amistad, además de ser su médica personal. La partida vencida sería la misma que se encontraba en los galpones del Ejército y que fuera quemada recientemente.
En el centro comunitario se alimentan 200 chicos diariamente, quienes acuden para recibir la merienda y la cena. Las cocineras del Centro Comunitario, además de atender a los 200 chicos carenciados, venden los productos de panadería que realizan, a fin de lograr ingresos genuinos que ayuden a las necesidades del lugar.
Según se indicó, en las primeras horas de la mañana se iba solicitar el inmediato retiro de la mercadería vencida y una urgente reposición, a fin de seguir con la normal tarea, que se ha visto interrumpida por la situación
El hecho podría provocar además un cortocircuito en la relación entre la ministro Degani y la titular del área de Discapacidad provincial, Cristina Cremer, quien quedó involuntariamente envuelta en esta situación, según informó Análisis Digital.
