Agregó que esto es lo que, por otra parte “confirma que la Presidenta no estaba errada en su decisión de despedirlo”, dijo el gobernador.
A su juicio, «el poder que Redrado dice tener en todo caso no está en la Argentina sino en el circuito internacional de burócratas de las finanzas en donde en su momento, cuando la Argentina flaqueaba de reservas, podría haber jugado un rol».
«En estos momentos, con 50.000 millones de dólares en el Central, acumulados gracias a la política económica de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, Redrado no es imprescindible ni necesario.
Y no tiene ningún sentido que un personaje con esas características esté poniendo en jaque al país con su obstinación”, insistió.
Finalmente, Urribarri sostuvo que «si de términos macabros se trata, creo que Redrado es un muerto que camina. El poder en el Central ya está en otro lado”.