“Hay muchos datos que se desconocen en esta investigación y declaraciones y elementos que ya están en la causa y probados: Se ha determinado que la víctima tenía relaciones con Acuña y la familia sabía de ello, incluso la mujer del imputado. Y todo esto está probado en la causa”, señaló el querellante.
“También está probado que Josefina le había exigido dinero al Acuña para justamente no contarle a su tía de la relación que existía entre ellos. Resulta que ese 29 de julio, Acuña y Josefina pautan por mensajes de texto encontrarse en una parada de colectivo, luego del partido de Boca sale ella del lugar y atrás sale él. En tanto, luego de un tiempo, regresa sólo él”, revela Azcué y agregó que todo esto también está certificado y probado, “tanto los mensajes de texto como testigos que vieron salir a ella y luego a él”.
“Ya no es una teoría, sino un planteo porque ya estamos en la etapa final del caso y mañana se leerán los alegatos y creo que existen pruebas suficientes para que los jueces lleguen a una certeza respecto a la materialidad, autoría, el móvil y agravantes del hecho porque lo creemos culpables, hay muchos datos que se desconocen, en esta investigación se ha determinado que el víctima había tenido relaciones sexuales con el imputado, todo esto (esto está en la causa con declaraciones de testigos y pruebas) eran familiares y además tenían relaciones”, dijo el querellante.
Resulta que el 29 de julio Acuña y Josefina pautan por mensajes de texto encontrarse en una parada de colectivo y esto también esta acreditado. Y además por testigos que dijeron que habían visto a estos mensajes y estos mensajes están incorporados en la causa. Está comprobado que Acuña también le ofrecía plata para tener relaciones con amigas. El 29 de julio, sale josefina de la casa después de ver el partido de Boca y esto es declarado por un testigo y sale Acuña atrás.
“Josefina desaparece y se la encuentra 27 días después y luego de haber investigado a la familia, al entorno, lugares, ex novios y, por esos mensajes, la investigación se direcciona a Acuña. En el primer momento fueron a buscar el cuerpo de Josefina a la zona de San Carlos porque Acuña es el principal sospechoso, encuentran la primer parte del cuerpo y se hace una pueblada en el casa de Acuña y, según declaró el comisario Schierloh, Ocampo, etc. Esa situación hace que se quiebre Acuña. Muchas personas que quisieron lincharlo y por eso se lo traslada a la Jefatura. Allí, la mujer va a llevarle y ropa y, según declaro ella, él le dijo ‘la mate negra, se me pelaron los cables porque me pedía plata’ y eso también fue escuchado por algunos funcionarios policiales que estaban allí. Eso fue sumamente trascendente”, señaló.
“Hay que analizar las pruebas articuladamente, no hay una sola prueba en este tipo de investigaciones que lleven a una certeza: son varias pruebas que articuladas llevan a una conclusión. Estamos hablando de un caso que lleva muchos días y muchas audiencias. Eran evidencias que hoy, en esta etapa son pruebas. La confesión informal o espontánea no fue en una declaración indagatoria, él le dijo esto a la mujer porque él quiso. Esa confesión está acompañada de otros hechos”, dijo Azcué.
“Se hicieron muchas pruebas periciales que no arrojaron ningun resultado, tiene que ver con el transcurso del tiempo desde que se cometió el homicidio hasta que se encontró el cuerpo condiciones climáticas, los 27 días que estuvo el cuerpo afuera. Fueron un montón de policías, de preventores, de testigos, todos declararon. Fueron 5 hipótesis diferentes desde que Josefina desapareció hasta que encontraron el cuerpo. Las pruebas contra Acuña fueron tomando mas fuerzas a medida que pasaba el tiempo”, dijo.